POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)

Para renovar el carnet de familia numerosa la Consejería demora cinco meses; las licencias de obras del Ayuntamiento de Oviedo, seis meses, suponiendo que vayan bien engrasadas; la demora en el HUCA para operar un tumor en Urología es de cinco meses, seis para una consulta de salud mental, ¡de locos!, y un año para someterse a una resonancia magnética, cuando lo difícil sería lo contrario, separarse del imán; la beca Erasmus de nuestra Universidad llega a los estudiantes tres meses más tarde de lo prometido; los retrasos en los Juzgados de lo Social pueden alcanzar dos años, y el divorcio exprés unos 120 euros y un mes… Pues bien, los independentistas catalanes llevan a su Parlamento una ley para, con independencia del referéndum de independencia, desenchufarse del resto de España en el pazo máximo de 48 horas; claro que, en este caso, tan sangrante, lo urgente es eternizarse.

Fuente: http://www.lne.es/