«FUE UN EXCELENTE ALCALDE E HIZO QUE EL MUNICIPIO PROSPERARA MUCHO», MANIFESTÓ EL CRONISTA OFICIAL DE PILOÑA, ANDRÉS MARTÍNEZ VEGA

Gilberto Espina Coballes, el primer alcalde de la democracia por la Unión de Centro Democrático (UCD) en su municipio natal, Piloña, entre 1979 y 1983, falleció a los 88 años de edad. Durante unos años compaginó el cargo de regidor con el de diputado regional en la Junta General del Principado, donde ocupó escaño hasta 1987. Años después de abandonar la primera línea pública, apoyó a Francisco Álvarez-Cascos como militante de Foro. Cuando se retiró de la vida política continuó su carrera como empresario en el taller de coches que había heredado de su padre a los 24 años y que, en la actualidad, aún tiene actividad.

«Fue un excelente alcalde e hizo que el municipio prosperara mucho», manifestó el cronista oficial de Piloña, Andrés Martínez Vega, quien asegura que durante su mandato el concejo «vivió una época muy feliz». Martínez también destacó su papel como diputado regional, cuando le dio renombre a Piloña y «peleó por hacer valer los intereses del municipio». Su labor al frente del equipo de gobierno estuvo marcada por la puesta en marcha de los servicios públicos básicos y el consenso con los grupos de la oposición. Una opinión que continuó defendiendo como militante y vecino de Piloña, cuando instó a los gobiernos locales a dejar a un lado las rencillas políticas por el bien del municipio.

La Corporación piloñesa también expresó «su profundo pesar» y ha transmitido «el más sentido pésame a la familia». Lo hizo a través de un comunicado en el que añaden que «su figura política era muy respetada por los piloñeses y su fallecimiento dejará un gran vacío en el concejo».

El funeral se celebrará hoy, a las doce del mediodía, en la iglesia parroquial de Infiesto.

Fuente: http://www.elcomercio.es/ – Laura Castro