POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
No, señores, no.
Que no busco polémica alguna ni mucho menos infravalorar a otras parroquias colunguesas que no sean Duz.
No soy historiador ni en este momento pretendo otra cosa que transcribirles un texto espigado en la revista EL NALÓN con fecha 17 de abril de 1842.
Ustedes, después, juzguen lo que estimen oportuno.
«Se desconoce todavía la época de la población del concejo de Colunga, aunque es de presumir que haya sido en tiempos de Don Alonso el Sabio en el que se erigieron las más de las jurisdicciones de este Provincia y se fundaron sus Polas o Villas… Nuestro célebre Marina, originario de la aldea de Luces en la parroquia de Lastres, del mismo concejo, indicó haberse llamado este anteriormente BUERNES, y con este nombre aún subsiste un lugar en el mismo concejo y parroquia de San Juan de Duz. En medio de dicho lugar y dominando una espaciosa y amena llanura, existió antiguamente un edificio del cual se conserva con el nombre de LA TORRE, las paredes N, y NE, aunque algún tanto mutiladas…. En la pared del N. hay una PUERTA tapiada de construcción enteramente gótica, de piedra de grano labrada, y que por su figura denota mucha antigüedad… Fue acaso el castillo y solar de los Beltranes que según dice Carballo fueron señores de Colunga hasta que don Alonso Beltrán vendió su señorío a D. Rodrigo Alvarez de las Asturias…»
Insisto.
Yo no soy historiador y, además, desconozco la autoría de ese trabajo a quien la dirección de la revista denominó como «un suscriptor».
Lo que sí se es donde está ubicada LA PUERTA citada en el texto y la historia de su traslado para evitar que se perdiera como se perdieron muros y piedras importantes de aquella edificación noble.
Hace muchos años que hice esta foto con el permiso de la entonces propiedad de la finca donde está ubicada.