POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
Ha fallecido, después de una larga enfermedad, Gerardo Burgos Bravo, notario de Las Palmas de Gran Canaria. Nacido en Salamanca el 11 de julio de 1956, siguió los pasos profesionales de su padre, Gerardo Burgos Guerrero, registrador de la Propiedad, y se licenció en Derecho en la universidad de su ciudad natal.
Ingresó, por oposición libre, en el Notariado en 1983. Sus dos primeros destinos, Santa Marta y Montijo, en Extremadura, acrecieron su natural inclinación y afición a la naturaleza y al mundo rural. Por concurso de traslados, llegó a Las Palmas de Gran Canaria en 1996, a la notaría entonces demarcada en el Puerto de la Luz, que ha servido hasta el momento de su muerte, primero en la calle León y Castillo y luego en Nicolás Estévanez.