POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)

Hace ochenta años, concluyó uno de los episodios más terribles de nuestra historia como pueblo, la Guerra Civil Española. En vísperas de un tal día como hoy se firmó en Burgos el último parte de Guerra que puso fin a tres años de combates, de muerte y de huidas de un lugar para otro, aunque abrió heridas que parecen heredarse de padres a hijos sin una solución a las páginas ya escritas.

No obstante el ser humano parece que siempre está en continua lucha consigo mismo y con los demás. Hemos llegado a un punto en el cual, como en el medio ambiente, podemos rozar el punto de no retorno si no se es capaz de hablar con entendimiento entre las diferentes fuerzas políticas (ya que es ahí donde recae todo el argumentario social, económico, cultural, deportivo, de empleo, etcétera). Es bueno saber en qué momento nos encontramos, en que época vivimos, en qué periodo nos movemos, donde la sociedad avanza a una velocidad vertiginosa lejos de un mundo en B/N.

La política debe de ser usada para armar al pueblo con soluciones, no usar la política como arma de control. Cuando esto ocurre el enfrentamiento está más cercano de lo que creemos.

Es tiempo de aprender, escuchar, leer, trasmitir, estudiar, de hablar. Ser capaces de comunicarnos, debatir, ser conciliadores. Es hora de que el ser humano se comporte como tal.