Con mi colega Juan Martos Quesada, un ilustre catedrático jienense de la Universidad Complutense de Madrid que en su día, como Saulo de Tarso, tuvo una revelación y decidió asentarse en Bercimuel, ese «pueblo del Nordeste de Segovia en la ruta del silencio» que, «porque las cosas suceden por algo», se ha visto hermanado (simbiotizado diría yo) con FUENTEPIÑEL.
Yo sé lo que me digo y él también. Estamos en ello ¡Buenos días!