POR ANTONIO LUIS GALIANO PÉREZ, CRONISTA OFICIAL DE ORIHUELA (ALICANTE)
Siempre el nacimiento de un nuevo libro es motivo de satisfacción para aquellos que, de una u otra forma, permanecemos ligados a la historia de nuestra tierra.
Y, el gozo es aún mayor cuando el creador ostenta la distinción de Cronista Oficial de un pueblo. En esta ocasión, el protagonismo ha sido para Bigastro, en la Vega Baja del Segura en la provincia de Alicante, y para su Cronista Oficial, del que creo que puedo decir “el joven” en comparación con la media de edad de los que pertenecemos a la RAECO, Pascual Matías Segura Torá. Que, a pesar de sus años es un investigador e historiador cualificado, no sólo reconocido por las gentes de su pueblo sino también de sus fronteras.
Prueba de ello, fue la presentación de su obra “Historia de Bigastro. Identidad y patrimonio cultural a través de los tiempos” en el que desgrana la evolución del paisaje bigastrense, los orígenes históricos, la época ibérica, romana, musulmana y de la Edad Media. Llegando hasta la fundación del Lugar Nuevo de los Canónigos del Cabildo Catedral de Orihuela, su desarrollo en el siglo XIX y la vida cotidiana y la artesanía. Todo ello, en 428 páginas, cuyo texto es acompañado por una grata colección de imágenes, ya sean fotografías, dibujos y grabados.
Hablaba de gratitud de los vecinos de Bigastro y creo que queda justificada por el siguiente hecho: en principio el acto de presentación del libro estaba previsto realizarlo en el la Biblioteca Municipal que se alberga en el Auditorio que lleva por nombre del insigne bigastrense Francisco Grau Vegara, que fue General de Brigada de Músicos Militares de las Fuerzas Armadas Españolas, fallecido en 2019. Refiero, en principio, ya que motivado por el gran número de asistentes a dicho acto, una vez que se iba a iniciar, fue necesario atrasarlo unos minutos para trasladarlo al Auditorio, en el que podemos referir que su aforo de 347 localidades se encontraba completamente lleno y con muchas personas de pie en los pasillos.
Aspecto inusual en la presentación de un libro, y dicho, con respeto en el argot taurino fue “un lleno hasta la bandera”, lo que demostró lo que decía antes sobre el aprecio que a este investigador e historiador le tienen las gentes de su pueblo, que soportaron pacientemente casi una hora en la cola para que se les dedicara un ejemplar.
Esta aceptación popular es algo que nos enorgullece a todos los Cronistas Oficiales, muy especialmente a los que pertenecemos a la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales, por ser un reconocimiento a nuestro silencioso trabajo que fructifica al verlo plasmado en las hojas de un libro.
El acto fue presidido por la alcaldesa de Bigastro, María Teresa Belmonte Sánchez que tras introducirlo dio paso a la concejala de Cultura, Alejandra Moya Celedonio que rompiendo con la ortodoxia de lo que entendemos como presentación de un libro, insufló un aire fresco y original en su intervención, realizándola a modo de entrevista con el autor, desmenuzando así con agilidad los porqué y cómo se había llegado a ese momento en que culminaba el nacimiento de esta obra que fue gestada durante el confinamiento al que nos vimos sometidos por la dichosa pandemia.
Al igual que estuvo presente el agradecimiento a muchas personas que le habían ayudado en su trabajo, especialmente a Efrén Pamies que colaboró con el autor en la parte medio ambiental de la obra, y a aquellos que le habían auxiliado y que ya no están entre nosotros, llegando el autor a la conclusión de que el trabajo no era sólo suyo, sino de todo el pueblo de Bigastro.
Al final, la primera regidora invitó a sus vecinos a seguir disfrutando con la lectura de este libro que, dicho sea de paso, era una necesidad y que ha visto la luz gracias al Excmo. Ayuntamiento de Bigastro y al Ministerio de Cultura y Deporte.
Sólo me resta, seguir estimulando a Pascual y a aquellos otros Cronistas Oficiales más jóvenes de la RAECO a que sigan trabajando por y para sus pueblos. Pues, estoy convencido de que los Cronistas Oficiales somos necesarios en ellos como testigos de su historia.
Fuente: A.L.G.P.