POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Como ya les expliqué hace unos cuantos días, en Colunga, cuando sentimos deseo «inmediato» de una cosa decimos que «tenemos PETITE de…». El petite es como el antojo pronto y puntual que sienten las embarazadas y que si no se cumple -así lo cuentan las tradiciones- queda grabado en forma de lunar en el cuerpo del futuro nacido.
Y como al «petite» latino (pedid) sucede el «accipietis» (recibiréis), pues… ¡eso!
En CASA PRUDO, hoy, tuvimos petite de empanada; pero de esa empanada que hacemos a nuestro modo y que nada tiene que ver con las tradicionales gallegas o asturianas por ser elaborada con masa de hojaldre (señores puristas, ¡perdón!) y con un relleno que «es secreto de la casa».
¿Qué es una empanada?
El diccionario explica que consiste en una envoltura de pan que encierra en su interior un relleno de carne, pescado, mariscos, vegetales… Bien es verdad que en segunda acepción tiene una interpretación muy «sui generis»: «modo de ocultar un negocio sucio o fraudulento».
No, si por algo se dice que la empanada, aunque su origen sea griego y haya llegado a España con los árabes, es «MUY ESPAÑOLA». ¿Me entienden?
Escribía don Álvaro Cunqueiro en «A Cociña Galega» (Galaxia. Vigo 1983) que «hai quen dixo que a empanada é a invención do pobo pobre» para, en su trabajo de campo o de mar, llevar en un solo «sujeto» PAN Y CARNE, o PAN Y PESCADO, etc.
Bien es verdad que don Álvaro, en un alarde de psicología social, asocia la realidad de una EMPANADA con el carácter de las gentes gallegas. Lo explica en estos términos:
«Coido eu , ademais, que ao carácter de galego, vanlle as empanadas, que sempre son como unha especie de caixa ou buzón secreto , que si se cortan a rebanar, non se sabe o que trae dentro…».
La empanada, como su nombre indica, es la que utiliza como envoltura MASA DE PAN, más o menos suave según el arte de quien la elabora. El relleno varía según la época, las posibilidades, los pueblos… Hay empanadas de xoubas (sardinas), de bacalao, de berberechos, de anguila, de lamprea, de congrio, de lubina…Yo, en zona leonesa de El Bierzo, las he comido de caracoles, de carne guisada («de batallón»)… Y si se rellenan de dulce, no vean qué delicia.
Y ahora recuerdo que hubo en Colunga un párroco, don José Rendueles Trabanco, que era un auténtico especialista en EMPANADAS DE ANGUILA y cuya receta me cedió con mucho cariño de amigo sincero. Algún día lo comentaremos.
Pues así fue nuestra EMPANADA de hoy.
1.- LA MASA. Como hacemos una empanada con envoltura de HOJALDRE y no sabemos preparar esa masa, pues la compramos congelada de máxima calidad (no cito marcas, pero no siempre las más caras son las mejores).
2.- EL RELLENO. Preparamos un sofrito, tipo pisto, con cebolla, pimiento rojo, pimiento verde (poco) y tomate, Ya en su punto agregamos «el secreto» (piensen en «arcinos», que son oricios), bonito en conserva de aceite de oliva, y un toque (una «sospecha», dicen algunos)) de un fino andaluz.
3.- LA ELABORACIÓN. Untamos con mantequilla el fondo y paredes de un molde circular y forramos con la masa de hojaldre. Distribuimos el relleno y cerramos con más hojaldre, adornando con unas tiras de esa masa. Pintamos con huevo batido y hornea a 180º C hasta que tome color dorado intenso.
Se saca del horno, enfría y se desmolda.
4.- EL FINAL. Ese ya se lo imaginan ustedes.