POR ANTONIO SÁNCHEZ MOLLEDO, CRONISTA OFICIAL DE MALANQUILLA (ZARAGOZA)

A lo largo del año que acabamos de despedir, el ayuntamiento de Malanquilla ha llevado a cabo diversas actuaciones de acondicionamiento y restauración en diversos puntos de interés del patrimonio cultural de la localidad.

Entre otras, cabe destacar las obras en la antigua ermita De San Pedro, encima de la fuente nueva, que se ha convertido ahora en un cálido y acogedor espacio-refugio para uso y disfrute de todos los que hasta allí se acerquen.

Importante también ha sido la restauración y embellecimiento del altar del Santo Cristo del Humilladero, faro devocional de los malanquillanos, del que se ha quitado el cristal que tanto afeaba el conjunto. Se ha limpiado además la imagen del Cristo que desde su mirador, a la salida del pueblo en dirección a Clarés, sigue guiando los destinos de sus moradores.

Y no menos destacado será, en este 2019, la intervención en el molino de viento para dotar de iluminación exterior al monumento, emblema de la localidad. Una medida esta largamente esperada y que, por fin, está próxima a hacerse realidad, si las anunciadas elecciones del mes de mayo no dan al traste con el proyecto.

Felicitamos al ayuntamiento por estas iniciativas animándole a proseguir contribuyendo a la salvaguarda de un rico y variado patrimonio que nos ha tocado disfrutar y preservar para las generaciones futuras.