POR JOSE ANTONIO RAMOS RUBIO, CRONISTA OFICIAL DE TRUJILLO (CÁCERES), DOCTOR EN HISTORIA
El hecho de no presentar todos los epitafios de los Obispos placentinos que han regido la Sede hasta el siglo XX se debe a varios motivos, a voluntad propia fueron trasladados a otro lugar o por falta de inscripciones al ser enterrados en la propia catedral. Por ejemplo, delante del altar de las Reliquias en la catedral yacen las cenizas de diez prelados cuyos nombres dio a conocer Benavides Checa1, podemos citar al Dr. Fr. José Jiménez Samaniego, don Juan Villacé, Fr. Plácido Bayles, don Francisco Bustamante, don José Rodríguez y don Pedro Gómez. Los demás prelados que rigieron la sede placentina en el primer siglo de la dominación borbónica en España murieron ocupando ya otras sedes, o habiendo fallecido en Plasencia, fueron trasladados sus cadáveres a distintas iglesias extradiocesanas.
DIEGO BADAN, O. F. M (1424-1426)
Hunc Maiorica genuit, quem Summus ad astra perduxit .
Hunc religio docuit, quem aptum virum produxit.
Badam hic vulgo Didacus vocatus
Est, gratum donum, de hac stirpe natus.
Gradibus ternis praefuit excelsus.
Gratia Christi moribus praeventus.
Puer undemnis mundana contemsit,
Minorum vestes minimus acceptit.
Professus, Tauri studuit artes.
Audivit, legitque per varias partes.
Doctrinae sacrae est factus Magíster,
Provinciam rexit electus Minister.
Successit Pastor eclesiae trinae
Carthaginis, Pace atque Placentinae.
Sex vixit undemnis annorum aetates.
Iesus illi merces sit, fons pietatis.
Carthaginis praesul hic est sepultus.
Post han mundi vitam morte defunctus.
Bis septingentos Domini post annos
“Sex et viginti” adduntur numero.
Die hac et mense migravit praedictus;
Quiescat in pace, sitque benedictus. Amen.
Vivens sic scribit, de sua certus morte.
Incertus de hora gaudet mortis mora.
Empus si addatur, Summo dirigente,
Versus mutabitur, vivo congaudente.
El epitafio de Fr. Diego Badán, que con algunas variantes, copian también Fr. Alonso Fernández y Solano de Figueroa, estaba en Mayorga, en la capilla mayor del convento de San Francisco, fundación del prelado2.
Era franciscano. Fue Provincial de su Orden y en 1410 ocupó la sede de Badajoz; en 1417 en Cartagena y en 1422 fue nombrado por Martín V3, para regir la de Plasencia. A sus tres sedes alude el epitafio.
GONZALO DE SANTA MARIA (1428-1448)
Hic quiescit hábeas reverendi Patris Domini Gundisalvi,
Episcopi Seguntini, serenissimi Principis domini nostri Ioannis
Huius nominis secundi Regis Cassellae et Legionis.
Hic venerandus Pontifex fuit filius, ex legitimo
Matrimonio natus, Reverendi Pontificis Domini Pauli.
Cuius corpus in sepulcro alterius parientis tumulatum
Existit, et post multa pia opera, liberatus de corpore
Mortis huius, profectu est ad Omnipotentem Deum
Decima séptima mensis decembris anno Domini
Millesimo quadrigentesimo quadragesimo octavo,
Aetatis suae sexagésimo nono. Clementia
Divina illum in gloria sua collocare dignetur. Amen.
Debemos este epitafio a Enrique Flórez4, se encontraba en el antiguo convento dominicano de Burgos, convertido en cuartel desde la Desamortización de 1986. El escudo de este prelado se encuentra en las claves de la bóveda del claustro de la catedral de Plasencia (flor de lis).
Estuvo enterrado en la catedral vieja placentina, en un sepulcro de mármol. Según Fr. Alonso Fernández, fue trasladado a San Pablo de Burgos, patria del obispo5. Fuente: El autor J.A.R.R (1ª parte)