EL ESCRITOR Y GASTRÓNOMO HABLÓ SOBRE LA FIGURA DEL ESTUDIOSO BLIMEÍNO, GALARDONADO EN DICIEMBRE CON EL «PIMIENTO DE ORO» POR SU LABOR CULTURAL

Elviro Martínez, natural de Blimea, ha sido una figura referencial para la cultura asturiana de las últimas décadas. Así quedó patente en la conferencia «Elviro Martínez, historiador asturianista». El acto, organizado por la Asociación Bicentenario de San Martín del Rey Aurelio, contó con la colaboración del Ayuntamiento de San Martín y el Club LA NUEVA ESPAÑA en las Cuencas.

El profesor Julio Velasco se encargó de introducir el acto y lo hizo llevando a cabo una sentida y cariñosa semblanza del conferenciante, el químico, escritor y gastrónomo José Antonio Fidalgo, cronista oficial de Colunga y colaborador de LA NUEVA ESPAÑA durante más de treinta años, que mantiene una «estrecha relación personal, laboral y de amistad con el protagonista de la ponencia, Elviro Martínez».

«Elviro es un blimeíno importante y que ha sido profeta en su tierra. El año pasado fue galardonado con el «Pimiento de Oro» en reconocimiento a su trayectoria», destacó Fidalgo, que puntualizó que «es cierto que fue sacerdote y llevó a cabo su labor pastoral en Llanes, Tineo y Libardón, pero jamás perteneció a los jesuitas tal y como aparece en algunas páginas de internet». También destacó que «es Doctor en Derecho, Licenciado en Filosofía y Diplomado en Genealogía, Heráldica y Derecho Nobiliario y ejerció como profesor de Derecho Natural y profesor de Historia en el Colegio de la Inmaculada de Gijón». Del mismo modo, evidenció que «se trata de un hombre bueno, de conversación amena, enormemente culto, pulido en su escritura y su lenguaje y tremendamente exacto en sus precisiones históricas, científicas y culturales».

«En el año 1976, y al amparo de la Biblioteca Asturiana del Colegio de la Inmaculada de Gijón y en colaboración con el padre José María Patac, fundó «Monumenta Histórica Asturiensia», una colección que tiene por finalidad recuperar las fuentes documentales más importantes sobre Asturias», prosiguió el ponente, que también puso de manifiesto que «con una intención parecida, fundamos la editorial Auseva».

«Elviro volcó toda su pasión en la asturianía» aseguró el conferenciante, que enfatizó «el puntillismo exquisito y el amor por Asturias» del blimeíno así como su ingente trabajo de investigación «sobre interesantísimos aspectos como el folklore, supersticiones y brujería, tradiciones, cantares, costumbres, gastronomía o mitología de Asturias, que fueron publicados en su mayoría por la editorial leonesa Everest».

Fidalgo mostró su convencimiento de que «Asturias es una región con identidad propia que muchas veces se pierde por el afán de incorporar cosas foráneas» y puso de relieve «la lucha de Elviro por mantener esa identidad de asturianía, ya que aunque vivimos en una aldea global, el siempre repite que lo nuestro es lo nuestro». Y es que, según el cronista, «ser asturiano es un carné de identidad que deberíamos llevar entre los dientes».

Fuente: http://www.lne.es/ – Silvia martínez