La Hermandad de San Cosme y San Damián, de la que fue su presidente desde 2002 a 2009, le nombró ayer hermano mayor. José Simeón Carrasco Molina (Abarán, 1956), casado y padre de dos hijos, catedrático de Lengua y Literatura, dirige el lES Diego Tortosa, de Cieza. Y es, además, uno de los dos cronistas oficiales de la Villa. Su amor y devoción a los patronos de Abarán es indescriptible.
-¿Qué ha supuesto para usted este nombramiento? ¿Lo esperaba?
-Para mí ha sido una gran satisfacción porque todo lo que se relaciona con los Santos Médicos es algo que valoro mucho. Además no me lo podía esperar porque es la primera vez que se da esta distinción. Ha sido una iniciativa de la nueva junta directiva que preside Arsenio Fernández, a la que agradezco de corazón este detalle.
-¿Cuáles son las obligaciones y funciones de un hermano mayor?
-Es un cargo que no tiene ninguna función de gobierno, eso le corresponde a la Junta Directiva, solo tiene un valor honorifico y se renueva cada año.
-¿Cuáles son los méritos que debe reunir la persona a la que se le distingue con este nombramiento?
-Pues supongo que esta distinción se concederá cada año a personas que destaquen por potenciar y divulgar la devoción y el culto a San Cosme y San Damián.
-¿Qué supone para usted la devoción a estos santos?
-Es un componente muy importante en mi vida desde que tengo uso de razón. Como cristiano creo que son un ejemplo maravilloso de fe y generosidad y como abaranero considero que representan la mejor seña de identidad de este pueblo. Por ello he dedicado mucho tiempo y esfuerzo en investigar sobre todo lo referente a estos santos. Fruto de ello, entre otros artículos y trabajos, es un libro publicado en 1992 con el título de ‘Los Santos Médicos en Abarán: arraigo de una devoción’, escrito en colaboración con José David Molina Templado.
-¿Desde cuándo son los patronos de Abarán?
-En realidad su culto se remonta a mediados del siglo XVI y pensamos que su comienzo se debe a la labor de Cosme Juan de Durán, un sacristán que vino de Valencia. Entonces el Patrón de Abarán era San Martín, aunque debido a su papel para acabar con una epidemia, es a mediados del siglo XIX cuando se cambia el patronazgo a estos dos médicos.
-¿Algún detalle llamativo de estos dos santos?
-Son santos del siglo III procedentes de Asia Menor. De su vida se sabe poco, eran hermanos gemelos y también fueron santos sus otros tres hermanos (Antimo, Leoncio y Euprepio). Se dedicaban a la medicina y nunca cobraban nada a sus pacientes. Hay muchas leyendas sobre ellos, entre ellas la que dice que fueron los que realizaron el primer trasplante de la historia. Se cuenta que un devoto tenía una pierna con cangrena, rezó a estos santos y una noche, mientras dormía, ellos fueron a un cementerio y cortaron una pierna a un hombre recién fallecido; después llegaron a donde dormía su devoto y le cambiaron su pierna enferma por esta sana.
-¿Conoce algún otro pueblo en que también sean patronos?
-Con motivo de escribir el libro, rebusqué mucho y descubrí muchas localidades con estos patronos: Arnedo (La Rioja),Torredonjimeno (Jaén), El Peral (Cuenca), Cortes de Baza (Granada), Bayona (Pontevedra), Relleu (Alicante), Hontoria del Pinar (Burgos)..en España, pero es en el sur de Italia donde hay decenas de pueblos bajo su patronazgo. De ellos mantenemos un contacto muy estrecho con Alberobello (Bari), donde son miles los devotos que festejan a estos santos. Hace ya tiempo que buscamos hermanar Abarán con este pueblo italiano.
-¿Cuál es para usted el momento más emotivo de la feria de Abarán?
-Es evidente que el acto central y la base de nuestras fiestas es la procesión del día 26, en la que bajan de su ermita a la parroquia. Pero el momento más emocionante es la entrada en su templo el día 29. Ese instante es todo un símbolo.
Fuente: http://www.laverdad.es/ – Jesús Yelo