POR ANTONIO BOTÍAS SAUS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA

Se cree que su monumento, erigido en 1894, fue el primero que en España se dedicó a un maestro. Y se hizo en La Ñora, donde impartía sus clases el recordado Cipriano Galea García (1816-1889), quien llegó al pueblo en 1846 para encargarse de la educación de la primera escuela oficial de niños. Allí se mantuvo hasta su jubilación, en 1889. Juan Patricio Peñalver, investigador y coordinador de los actos programados con motivo del bicentenario del nacimiento de Galea, recuerda la figura de un profesor que durante 43 años ejerció su vocación con tanta humildad como reconocimiento cosechó. El Ayuntamiento de Murcia, a través de una moción aprobada por todos los grupos, debatirá el lunes en su Pleno la conservación del monumento y los actos a celebrar.

¿Por qué es importante la figura de Cipriano Galea?

Él no pretendía ser alguien importante. Desempeñó su labor docente durante 43 años de un modo muy humilde, pero con una abnegación que atrajo a alumnos incluso de fuera de la provincia y le granjeó un profundo afecto y reconocimiento público.

Hasta el extremo de levantarle un busto. ¿Qué relación concreta tuvo con La Ñora?

Era de Librilla. Su relación con La Ñora comenzó en 1846, cuando fue nombrado maestro de este pueblo y de Javalí Viejo, una zona de gran analfabetismo y delincuencia. Pudo aspirar a puestos mejores, pero permaneció aquí hasta su muerte por considerar que era donde más se le necesitaba.

¿Qué se sabe sobre su vida?

Lamentablemente no se conserva ningún escrito de Galea, aunque sí referencias que ahora van a ser publicadas. Hoy en día, se le conoce sobre todo por un colegio que lleva su nombre y por el monumento de la plaza de la iglesia de La Ñora.

¿Quedan en el pueblo descendientes de Galea?

No, pero tenemos contacto con tataranietos que residen en Madrid y Galicia. Ángel Vian Ortuño, que fue rector en la Complutense, era bisnieto suyo, y estuvo en un acto en La Ñora en 1982. Aparte, una nieta se casó con otro maestro ilustre, Pelagio Ferrer.

¿Quiénes componen la comisión organizadora del bicentenario?

La iniciativa surge de un grupo de vecinos de La Ñora y Javalí Viejo vinculados con la docencia, la cultura y el arte. La comisión se reúne periódicamente y también participan representantes de los partidos políticos y de los centros educativos de la zona.

¿Qué actos tienen previsto realizar en los próximos meses?

Ya está en marcha un concurso de narrativa en los tres colegios de estas pedanías. Aparte queremos publicar una biografía y pedir que se restaure y catalogue su monumento. Y en octubre propondremos una semana cultural, coincidiendo con la fecha de su nacimiento.

¿Cuentan con apoyo público para celebrar esta efemérides?

Por el momento, muy poco. No está siendo fácil. Para algunos gastos tenemos predisposición de las juntas y de otros entes como la Fundación Cajamurcia. Y para la restauración del monumento, dado su carácter público y su relevancia histórica, esperamos obtener apoyo del Ayuntamiento de Murcia.

¿Por qué desean que se catalogue el monumento?

Está considerado nada menos que el primer monumento público en toda España dedicado a la memoria de un maestro. Es de 1894 y afortunadamente ha resistido los avatares del tiempo. Consideramos que ya es hora de que se catalogue para que goce de mayor reconocimiento y protección.

¿Qué otros enclaves de la zona habría que poner en valor?

Tanto Javalí Viejo como La Ñora atesoran importantes vestigios históricos. Yo destacaría el paraje de la Contraparada, la ‘Asomá’, el conjunto formado por la rueda y el acueducto, la Noria de Felices, la ermita de La Ñora y el monumento a Galea. Al menos, esos.

Fuente: http://www.laverdad.es/