EN LA MESA SE SENTÓ SERVANDO FERNÁNDEZ MÉNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE NAVIA (ASTURIAS)
«Navia y su ría merecen más atención por parte de los poderes públicos, en aras de ese carácter de cabecera de comarca que tiene el concejo». Así lo expresó ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA el jurista y escritor Javier Junceda Moreno, durante la lección previa a las XIV Jornadas de historia de Navia, que se presentaron ayer y que se desarrollarán entre los días 23 y 25 de agosto en Centro Cultural Liceo de la capital naviega.
En la mesa se sentaron Servando Fernández Méndez, cronista oficial de Navia y presidente de la Fundación de Amigos de la Historia; Gonzalo Asenjo Palmerola, concejal de Cultura del Ayuntamiento de Navia, y Santiago Fernández, director del aula Valdés-Salas de la Universidad de Oviedo, quienes destacaron el alto nivel intelectual que ha ido adquiriendo el encuentro anual hasta llegar a ser un referente en el verano asturiano. Tampoco se olvidaron los ponentes de destacar el papel desempeñado por el economista Rafael Anes y Álvarez de Castrillón en el desarrollo de las jornadas.
Javier Junceda centró su charla en las normas de ordenación del territorio, que, en su opinión, en enclaves como Navia «deberían incluir criterios más estrictos en cuanto al diseño de inmuebles a aplicar por el urbanismo local, para evitar que se construyan edificaciones sin las características tan cuidadas del urbanismo de antaño en Navia y la comarca».
A juicio de Junceda, la consideración de Navia como cabecera de comarca «debe ir acompañada de equipamientos y servicios propios de tal capitalidad». Puso como ejemplo la recuperación del Juzgado de primera instancia e instrucción que Navia tuvo hasta mitad del siglo pasado, debido a su pujanza económica e industrial. «Igualmente estimo que esa capitalidad tendría que ir acompañada de inversiones en sus más significativos enclaves, en especial en la desembocadura del Navia y la poza y su entorno, hoy amenazado de desaparición», indicó.
Fuente: http://www.lne.es/ – M. J. I.