LA CITA ESTÁ ABIERTA A TODOS LOS SEGOVIANOS Y TENDRÁ LUGAR EN EL ACUARTELAMIENTO DE SAN FRANCISCO A LAS 18:00 HORAS CON LA PRESENCIA DEL PRESIDENTE DEL CENTRO SEGOVIANO EN MADRID Y CRONISTA OFICIAL DE RIAZA, ANTONIO HORCAJO

El Centro Segoviano en Madrid entrega hoy viernes el premio ‘Manuel González Herrero de Fidelidad a la Tierra’ a la Academia de Artillería de Segovia. Será en el salón de Actos del Acuartelamiento de San Francisco a partir de las 18:00 horas.

La ceremonia está abierta a todos los segovianos que quieran presenciar la entrega del premio, hasta completar el aforo.

El Centro Segoviano de Madrid ha concedido este año a la Academia de Artillería este galardón que fue establecido hace tres años, y tiene como objetivo premiar aquellos segovianos, “que sienten profundamente Segovia y lo segoviano”, según las bases del premio.

La ceremonia coincide con el 250 aniversario de la creación de la Academia Militar en Segovia.

Entre los argumentos que ha destacado el presidente del Centro Segoviano en Madrid y cronista oficial de Riaza, Antonio Horcajo, señala lo “mucho y bien que ha ofrecido el prestigioso Centro de Instrucción Militar a Segovia y a los segovianos”. “Y ello no solo desde las aulas o desde los campos de prácticas, sino desde la convivencia humana que tanto ha enriquecido a las dos partes. Es, pues, una ocasión propicia para poner de manifiesto nuestra gratitud y pedimos al corazón de nuestros paisanos que se una a la manifestación de ese sentimiento hacia quien ha sido leal con lo nuestro, de tal manera que de ellos también es, pues, con orgullo, llevan por el mundo su categoría de segovianos adoptivos, enriqueciendo de manera excepcional a la Segovia ausente, tan ligada al íntimo del corazón segoviano”.

La Academia de Artillería se fundó como institución académica militar en 1764 como Real Colegio de Artillería en el Alcázar de Segovia, en tiempos del rey Carlos III a iniciativa de Félix Gazola, su primer director. Es la Academia militar más antigua del mundo en activo. Está destinada a la Enseñanza de formación, estudios de perfeccionamiento y adiestramiento en simuladores, para oficiales, suboficiales y tropa del arma de artillería.

Su origen tiene relación con la nueva estructuración de un ejército moderno que se había ido consolidando durante el periodo de la ilustración española. Las instalaciones del Alcázar se adecuaron a su función docente, convirtiéndose en el siglo XVIII en una de las academias militares más modernas de Europa.

Durante la Guerra de la Independencia Española, los cadetes que quedaron al cuidado de la Academia mientras los oficiales marchaban al combate, debieron capitular ante los ejércitos franceses. En el periplo de la guerra, el Colegio de Artillería hubo de abandonar el recinto, trasladándose a Salamanca, Galicia, interior de Portugal Huelva y después a Sevilla. También se instalaron en Menorca y Palma de Mallorca, no pudiendo regresar a Segovia hasta finalizar la guerra, en 1814.

En la Guerra Civil Española, y encontrándose la mayoría de la oficialidad de la Academia unida a los rebeldes, obligó a una nueva ubicación mientras se desarrollaba el conflicto y, de forma móvil, se crearon las unidades bajo la fórmula de Academia de Artillería de Campaña.

En octubre de 1939, ya con el gobierno de la dictadura militar, la Dirección General de Enseñanza Militar nombra cinco prestigiosos jefes para dirigir las Academias que resucitan de sus cenizas tras su disolución por parte del presidente Azaña. La Academia de Artillería, dueña de nuevo en exclusiva de su cuartel segoviano, quedó al mando del coronel habilitado de artillería Luis Armada de los Ríos. Y desde entonces ha mantenido su actividad.

Fuente: http://www.eladelantado.com/