POR MARTÍN SÁNCHEZ GONZÁLEZ, CRONISTA OFICIAL DE GETAFE (MADRID) Y AMIGOS DE TORREJÓN EL RUBIO
Aunque se encuentra en riesgo de abandono ha sido reconocido como uno de los 116 pueblos más bonitos de España.
Escondido en la indómita Sierra de Gata se encuentra el pequeño y encantador pueblo de Trevejo, un lugar mágico de gran belleza que forma parte del municipio de Villamiel en la provincia de Cáceres. Se trata de una antigua villa, recientemente incluida en los 116 pueblos más bonitos de España, que representa la rica herencia cultural y natural de esta región de Extremadura.
En cuanto a los orígenes de Trevejo, se sabe que estos se remontan al siglo IX, durante la época de la Reconquista, cuando los musulmanes construyeron varias fortalezas en la zona, incluyendo en el lugar donde se encuentra hoy Trevejo. Esta fortificación inicial fue crucial en la defensa del territorio contra los avances cristianos, que dejó una influencia perdurable en la cultura y la arquitectura local.
Tras la Reconquista, las tierras de Trevejo, entonces semiáridas y poco pobladas, fueron repobladas y administradas por órdenes militares como la Orden de Alcántara y los Hospitalarios. Durante este período, la sierra se dividió en encomiendas, un sistema que definió la organización de la región.
El Castillo de Trevejo, elemento central en su historia, fue reconstruido en el siglo XV sobre una base más antigua. Este castillo no solo sirvió de fortaleza defensiva, sino que también era un auténtico símbolo de poder. A pesar de las reformas y los daños sufridos, especialmente durante la Guerra de Sucesión española en el siglo XVIII, las ruinas del castillo siguen siendo una pieza fundamental de la historia de Trevejo.
¿Qué ver en Trevejo?
Declarado de Interés Turístico, Trevejo atrae a aquellos interesados en la historia, la arquitectura, la naturaleza y la cultura tradicional. Las vistas panorámicas desde la torre del castillo, las tumbas antropomorfas y las estrechas calles empedradas crean un ambiente de época que encanta a los visitantes. Observar los atardeceres desde Trevejo, con sus tonos verdes y anaranjados, es especialmente memorable y representa uno de los espectáculos naturales más impresionantes de la península.
Un castillo estratégico y tumbas excavadas en granito
El Castillo de Trevejo, situado en la Sierra de Gata, es un sitio histórico de gran relevancia. Originalmente una fortaleza musulmana del siglo XII, jugó un papel crucial durante la Reconquista. En el siglo XV, se construyó el actual castillo sobre estos cimientos antiguos, marcando una nueva era en su historia. La arquitectura del castillo, con su imponente Torre del Homenaje y los restos de murallas y torres, se alza majestuosamente sobre un cerro rocoso, demostrando la estratégica importancia del lugar en tiempos medievales.
Sin embargo, el castillo sufrió daños significativos durante la Guerra de la Independencia española a manos del ejército napoleónico. A pesar de esta destrucción, partes esenciales como la torre espadaña se conservan hasta hoy, integradas en la estructura de la Iglesia de San Juan Bautista, funcionando como campanario. Esta iglesia, con sus singulares tumbas antropomorfas excavadas en roca granítica, es otro elemento notable del patrimonio de Trevejo.
En la actualidad, tanto el castillo como la iglesia se destacan como un importante punto de interés histórico y turístico, y desde lo alto del cerro en el que se erigen se pueden disfrutar unas espectaculares vistas. Además, los blasones que adornan sus torres narran la historia de las distintas órdenes militares que ocuparon la fortaleza.
El homenaje a la alcaldesa ‘Chon’
Adoración González Estévez, conocida cariñosamente como ‘Chon’, ha sido una figura clave en la preservación y promoción de Trevejo. Su labor como alcaldesa pedánea ha sido reconocida por los vecinos con un busto de granito situado junto a su casa, un homenaje a su dedicación a la villa.
Trevejo es un reflejo vivo de las tradiciones y el modo de vida rural español; y aunque está en riesgo de abandono, la aldea ha logrado preservar su encanto y autenticidad, gracias en gran parte al turismo responsable y a los esfuerzos de personas como «Chon».
Descubre los alrededores de Trevejo
Trevejo se sitúa en un entorno natural espectacular, en las estribaciones de la Sierra de Gata y cerca de la frontera con Portugal. A una altitud de unos 700 metros, el pueblo ofrece vistas panorámicas de la comarca y las sierras circundantes, incluyendo Garduño, Albilla, San Pedro y Cachaza. Su paisaje, marcado por castaños, robles y olivos, es especialmente hermoso durante el otoño y la primavera.
Durante esas épocas del año es muy recomendable aventurarse a disfrutar de las rutas de senderismo que conectan con pueblos cercanos como Hoyos y Villamiel. Además, los turistas pueden experimentar actividades tradicionales como ordeñar cabras y hacer queso, o incluso buscar pepitas de oro en arroyos locales.
¿Cómo llegar?
Para llegar a Trevejo, primero se debe llegar a Villamiel. Desde allí, una carretera bien señalizada, flanqueada por castaños y un típico bosque serrano, conduce a los visitantes directamente a la entrada de la aldea. Para los amantes del senderismo, existe una antigua vía de acceso, ahora convertida en un hermoso camino que ofrece una experiencia más inmersiva en la naturaleza.