CUENTA EL CRONISTA OFICIAL DE TOTANA (MURCIA), JUAN CÁNOVAS MULERO, QUE FUE EN EL AÑO 1257 CUANDO SE ESTIMA QUE COMENZÓ LA DEVOCIÓN A LA FIGURA A SANTA EULALIA DE MÉRIDA
Cuenta el cronista oficial de Totana, Juan Cánovas Mulero, que fue en el año 1257 cuando se estima que comenzó la devoción a la figura a Santa Eulalia de Mérida, vinculación que comenzaría con la llegada de los caballeros de la Orden de Santiago a estas tierras. En la actualidad, la talla de la Patrona de los totaneros reside once meses al año en su santuario de Sierra Espuña, en un idílico paraje conocido como La Santa. El mes restante, que coincide con la Navidad, lo pasa en la Parroquia de Santiago.
La bajada de la Patrona hasta Totana se produjo por primera vez en el año 1777, ya que el mal tiempo y las deficientes comunicaciones de entonces hacían difícil que los vecinos pudieran acercarse a honrar a su Patrona. En diciembre de aquel año se realizó la primera bajada a la ciudad.
Hoy en día, son miles los vecinos y foráneos -este año unos 10.000, según fuentes de la Policía Local- que manifiestan su devoción a Santa Eulalia de Mérida acompañándola en su trayecto de siete kilómetros. Muchos de ellos llegan en el servicio de autobús que desde primera hora de la mañana comienza a funcionar, siendo impresionante la cola de personas que esperan a la flotilla de autocares que cubre el trayecto.
Como manda la tradición, a las nueve en punto de la mañana, tras tomar fuerzas con unas migas de harina y chocolate caliente, comenzó la romería en la que miles de personas acompañaron a la talla de Santa Eulalia en esta preciosa tradición. A lo largo del recorrido, los hermanos que portan a la Patrona a hombros realizaron las habituales paradas en donde descansaron del peso del trono, a la vez que fueron agasajados por los vecinos, en los huertos ubicados en el recorrido, con todo tipo de viandas, como el caldo con pelotas, indispensable a esas horas en la fría mañana serrana.
La música de las rondallas, la ‘mantellina’ -bebida especial elaborada para la ocasión- y los dulces navideños animaron el trayecto de los romeros. Un camino que les llevó a estar con su Santa las doce del mediodía en el paraje de El Rulo.
Con una enorme traca y fuegos artificiales, allí las autoridades y la agrupación municipal recibieron a la Patrona, acompañados de los vecinos que decidieron no subir al monte y que esperaron a Santa Eulalia con sus mejores galas. De hecho, la tradición manda que en ese encuentro siempre se lleve una prenda de vestir de estreno. En su primera noche en la localidad, La Santa descansó en San Roque, llegando hoy a su destino final, la iglesia de Santiago. Allí pasará las navidades, regresando de nuevo en romería a su santuario el día después de Reyes.
Un asunto a debatir
El Ayuntamiento lanzó, unos días antes de la romería, un comunicado en el que anunciaba que solo se podrían encender fuegos vegetales en las zonas habilitadas para ello, en los parajes de El Ángel y El Grifo por orden de ocupación. En el resto del monte, indicó, solo con camping-gas.
Esta decisión generó cierto malestar en un sector de los vecinos que acostumbran a realizar hogueras en las romerías, por lo que ayer estaban recogiendo firmas para que se reconsidere la decisión. De hecho el alcalde, Juan José Cánovas, aseguró a ‘La Verdad’ que confía en que se pueda dar marcha atrás. El asunto, explicó, se tratará en el Pleno ordinario de este mes de diciembre.
Fuente: http://www.laverdad.es/