POR FRANCISCO SALA ANIORTE, CRONISTA OFICIAL DE TORREVIEJA (ALICANTE)
Todos recordarán la película ‘Psicosis’, dirigida por Alfred Hitchcock, que tiene lugar en un solitario motel, donde se alojaba una secretaria, Marion Crane; el motel estaba regentado por Norman Bates -Anthony Perkins, estableciendo un nuevo nivel de aceptabilidad de la violencia con comportamientos pervertidos y oscuros, porque las paredes de los hoteles encierran muchos secretos y misterios.
La posada del tío Parejo fue fundada en el último tercio de del siglo XIX, utilizada como hospedaje de marineros, veraneantes y comerciantes que, sobre todos los viernes, acudían al mercado semanal, sirviendo como lugar de descanso a los animales de tiro y a sus propietarios.
Su ‘nieta’ Fulgencia Gómez Gil, nació en 1888, heredando la fonda de su madre Concepción Gil Ibáñez, viuda de Parejo, que se había casado en segundas nupcias con Manuel Gómez Alonso, carretero de San Felipe Neri.
En de diciembre de 1908, Fulgencia contrajo matrimonio con Carmelo Menchón Limorte, propietario del Colegio de la Purísima, situado a la espalda del establecimiento hotelero, frente a la Plaza de la Constitución.
Entre otras historias sucedidas en este lugar, en noviembre de 1914, quedó en tierra del vapor en el que navegaba Gerónimo Rubio Alcobas, de 37 años, casado y vecino del barrio de Santa Lucía de Cartagena. Se hospedó en la posada. En la noche del día 9, avisó al hospedero para que lo llamase a las cinco de la mañana, pues marchaba a Cartagena en el carruaje que salía desde Torrevieja. Subió Manuel Gómez al dormitorio que ocupaba, llamó a la puerta repetidas veces, no contestándole, percibiendo solamente una fuerte y fatigosa respiración. Alarmado y creyendo que le hubiese ocurrido algo a su huésped, forzó la cerradura, viéndolo tendido en la cama, vestido, ensangrentado y casi sin dar señales de vida. Avisó inmediatamente a la guardia civil y al juez que, personados en el lugar, vieron como de su cuello manaba sangre de una enorme herida que casi le separaba la cabeza del cuerpo. Como aún vivía, se ordenó por el juez su inmediato traslado al Hospital de Caridad donde el médico Lorenzo Ballester Carcaño le curó, sin ser suficientes los auxilios, ya que a las ocho y media de la mañana falleció. Por señas que hizo Gerónimo al ser preguntado, fue él mismo quien se había lesionado.
Existen también noticias del banquete que los alumnos del Colegio de la Purísima dieron, el 13 de marzo de 1921, en honor a los profesores y a su director Carmelo Menchón, yerno de Manuel Gómez Alonso, en el hotel. El ágape fue servido por el fondista y, persona derechista muy destacada, más conocido por ‘el tío Pareja, con esplendidez y gusto. El comedor presentaba un artístico aspecto.
La mesa estaba puesta con lujo, como el anuncio de un suculento banquete. En cada cubierto había un artístico carnet con el nombre del invitado, la dedicatoria del banquete y el menú que había de servirse.
La luz del sol, entrando a torrentes por los balcones del comedor, contribuyó a aumentar el esplendor, que tuvo como marco profusión plantas colocadas en artísticos maceteros. Llegado el momento de descorchar el champagne y se desbordó la alegría la juventud, contagiándose todos.
Durante los primeros años de la República se publicitó como un “acreditado establecimiento que cuenta con amplias habitaciones y salas de recreo” y con “cocina a la española”. Años después, a primeras horas de la tarde del 3 de marzo de 1936, grupos extremistas, constituidos en manifestación, hicieron pasto de las llamas la ermita de la plaza de Fermín Galán -actual plaza de Oriente-; posteriormente y al cruzar las turbas frente al ’Hotel Gómez’, sonó un disparo desde uno de los balcones, resultando herido en un brazo el manifestante José Ruiz Martínez. Los manifestantes asaltaron el hotel y le prendieron fuego, marchando después al ‘Círculo Radical’, que quedó reducido a cenizas.
Después la muchedumbre asaltó e incendió el templo de la Inmaculada. Las llamas destruyeron también el Archivo Judicial. De madrugada, en el pueblo de La Campaneta, fueron detenidos Manuel Gómez Alonso, alias ‘el Pareja’, el cura párroco de Torrevieja, Saturnino Orduño , y dos de sus hermanos.
También fue detenido Diego Camacho Hernández, maestro de la Escuela Católica de Torrevieja; siendo conducidos a la cárcel acusados de disparar sobre ‘las masas’ desde los balcones del ‘Hotel Gómez’.
Acabala la Guerra Civil, la posada del tío Pareja pasó a llamarse ‘Fonda Gómez’, que, como pensión y ‘Hotel Gómez’ regentó Maruja Menchón Gómez. En la publicidad de aquellos años aparecía como “la fonda más antigua de la localidad”, no sabemos si el slogan actuaría de manera positiva.
Otro hecho ennegreció su historia en 1948, a los veinte días de haber desaparecido el esposo de Maruja Menchón, Ángel Viudes Vivancos, de 38 años, en el mar, en ‘Ferrís’, apareció su cadáver en aguas de San Pedro del Pinatar, donde algunos pescadores observaron su presencia junto a las salinas.
Tras quedar identificado el cuerpo, ya que no presentaba mutilaciones ni apenas descomposición, fue trasladado a Torrevieja. Su entierro se efectuó el martes, 5 de octubre, por la tarde, a última hora, en el cementerio de Torrevieja acudiendo al acto la familia y algunas personas íntimas.
Maruja Menchón, última de la saga hospedera de los Pareja, regentó el Hotel Gómez hasta la década de los años sesenta del pasado siglo.
Entre sus últimos huéspedes el beato fraile capuchino limosnero Leopoldo de Alpandeire, conocido por su generosidad hacia los necesitados y su disposición a ofrecerles consejo y comprensión; coros participantes en los certámenes de habaneras y numerosas familias de ‘pied noir’, que una vez alcanzada la independencia argelina arribaban venidos desde Francia en los meses de verano.
Si hablaran las viejas paredes de la antigua posada -hoy protegidas urbanísticamente y encorsetadas con ballenas de acero- seguro que nos contarían otras muchas escabrosas historias e intrigas que superarían la famosa película de Hitchcock.