POR MANUEL GONZÁLEZ RAMÍREZ, CRONISTA DE ZACATECAS (MÉXICO)
La campana de Dolores, según la tradición histórica, fue la herramienta que usó el cura Miguel Hidalgo para llamar a la rebelión contra las autoridades virreinales el 16 de septiembre de 1810, desde su parroquia en la Ciudad de Dolores, Guanajuato. Este histórico hecho fue presenciando por Ignacio Allende y Juan Aldama, ambos personajes importantes de la lucha de independencia.
La campana fue fundida el 28 de julio de 1768, se le dio el nombre de Esquilón de San José, en ese entonces, patrono de la Nueva España. Fue hecha de bronce. Hoy día se ubica en el balcón central del Palacio Nacional. Cada 15 de septiembre se toca en la respectiva ceremonia protocolaría.
Esta campana ubicada hoy sobre el balcón central de Palacio Nacional está fundida en bronce; mide 1.77 metros desde la orilla de la boca hasta la parte superior del contrapeso, y 1.09 metros de diámetro.
Existen al menos 32 réplicas fundidas y se encuentran a lo largo del país, entre ellas, ZACATECAS.
Fue hace 62 años… cuando llegó a la ciudad de Zacatecas, una réplica de la Campana de Dolores, con la que el Cura Miguel Hidalgo convocó al pueblo, aquella madrugada del 16 de septiembre de 1810.
En 1960, el presidente Adolfo López Mateos envió una réplica de esa campana a los 32 estados de la República Mexicana. Y fue durante las conmemoraciones del 150 aniversario del inicio de la lucha por la independencia de México.
En Zacatecas fue instalada en el remate de la portada del Palacio de Gobierno. No ha dejado de sonar cada 15 de septiembre, ni siquiera en las fiestas patrias de 2020 y 2021, los años de la pandemia.
Manuel González Ramírez
Cronista de Zacatecas.
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