POR DOMINGO QUIJADA GONZÁLEZ, CRONISTA OFICIAL DE NAVALMORAL DE LA MATA (CÁCERES)
El jueves día 24 se clausuraron los XXIII Coloquios Histórico-Culturales del Campo Arañuelo con la ponencia titula «La valiosa y vigente obra de Pablo Jiménez García», obra del fundador y coordinador de los mismos, Cronista Oficial de Navalmoral de la Mata, Domingo Quijada González. Cuyo resumen publica la web de Radio Navalmoral: http://www.radionavalmoralcope.es/
El gran poeta moralo del momento y del pasado, nació en Navalmoral en 1943.
Cursó sus primeros estudios en el colegio de la Vía de Navalmoral, pasando después al Seminario de Plasencia donde estudia Humanidades y Filosofía que compagina con los de Solfeo y Piano en el Conservatorio Nacional de Música de Madrid.
Pero abandona la preparación religiosa y se traslada a la capital de España, incorporándose a la vida laboral trabajando en el sector bancario, hasta su jubilación; conjugando su trabajo con sus dos grandes pasiones: la poesía y la música.
Desde muy joven le premian y editan sus obras, hasta nuestros días. Siendo socio de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles.
En 1978 publica su primer libro de poesías, «La luz bajo el celemín», y que un año después presenta en su pueblo natal.
Su segunda obra, “Cáceres o la piedra y otras soledades”, que editó la Delegación Provincial del Ministerio de Cultura de Cáceres, es presentada en 1981.
Ese mismo año escribe su libro «Descripción de un paisaje», con el que obtuvo el “VI Premio de Poesía de la Ciudad de Badajoz”, convocado por el Ayuntamiento de esa ciudad y editado por la Diputación de esa provincia.
En 1985 consigue otro premio literario: ahora el Rodrigo de Cota de la ciudad de Toledo de Poesía, con su libro de poemas «El hombre me concierne» (Toledo, 1985).
Un año después –1986–, logra el Premio de Poesía “Ciudad de Irún” con “Destiempos y moradas” (San Sebastián, 1986).
Época en la que desarrolla su faceta de musicólogo en el programa de Radio Cultura, de la Universidad Politécnica de Madrid. Y, a lo largo de varios años, firma la sección “La soledad sonora” en la revista Nayagua del Centro de Poesía José Hierro, relacionando sus grandes pasiones, música y poesía.
En abril de 2001 Pregonó la Semana Santa morala, en cuya intervención nos transportó a los años de su infancia y a los festejos sacros de entonces.
Tras un lapsus editorial sin publicar, en 2004 regresa con “La voz de la ceniza”, publicado en Madrid por Beturia Ediciones (Madrid, 2004), de cuya asociación radicada en Madrid y que tiene como objetivo dar a conocer la cultura extremeña. Obra en la que se mezclan los sonetos con la rima libre, los recuerdos del pasado con las vivencias del presente, las evocaciones a la música con los sentimientos y sensaciones personales.
No pasó el tiempo, no; pasó el amor
y con él la materia que lo hacía
reconocible. O no pasó el amor
y sólo el tiempo del amor pasó.
O quizá no, quizá sí pasó el tiempo
por sobre mí con todo y sus caballos
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En el 2006 presentó en la Fundación Concha de Navalmoral un nuevo libro de poemas, “Prosas para habitar la noche”, editado poco antes por la Diputación de Cáceres (Institución Cultural “El Brocense”, Cáceres, 2005). Evocando a la Biblioteca Concha, “de la que saqué tantísimos libros y donde nació mi amor a la literatura”.
Seis años después, en 2012 (tras su jubilación, con la que llega su etapa más productiva), Pablo Jiménez logra el primer premio del «Tardor de Poesía» de Castellón con el libro «Figuraciones (cuadros de una exposición)». El poeta moralo se impuso a las casi doscientas obras que concurrían a la XVII edición del mismo. Cuando presenta la obra en Navalmoral, la nostalgia le envolvió cuando aseguró que sigue llevando a su pueblo muy dentro del corazón en forma de recuerdos de sus paseos por los Cerros o de sus lecturas interminables en la biblioteca de la Fundación Concha donde, precisamente, se presentaba esa obra.
Al año siguiente (12 de diciembre de 2013), coincidiendo con el segundo seminario sobre ‘La literaria extremeña en el aula’ que impartió el CPR de Navalmoral, en la Sala de Exposiciones de la Fundación Concha tuvo lugar la presentación del poemario titulado “Deducida materia”, novena obra de Pablo y editada por Beturia. Obra en la que afloran, como tantas veces en su obra, sus recuerdos de niñez en Navalmoral.
Y, en octubre de 2014, nuestro poeta gana con la obra ‘Círculos’ el “XXXIII Premio Leonor de Poesía”, dotado con 10.000 euros, convocado por la Diputación de Soria. En el acta, el Jurado ha reconocido el trabajo de Jiménez García «por su capacidad para captar lo poético en lo cotidiano, al tiempo que invita al lector a formar parte de su universo creativo«. He aquí un fragmento de un poema de esa obra:
Recuerda,
olivares arriba, la quebrada
orillada de espinos y zarzales
hacia la cerca
del abuelo Zenón, el repecho costero
de las Minas, la higuera
que nadie
cosechaba rebasando la linde…
En el 2015 Beturia le edita ‘Ars Moriendi’ que, tras ser presentada en la Asociación de Escritores y Artistas Españoles de Madrid, el 25 de noviembre de este año lo hace en su pueblo natal, coincidiendo con el final de los XXIII Coloquios Histórico-Culturales del Campo Arañuelo a él dedicados.