POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
Junto con mi compañero, paisano y amigo Fernando Cortés, escribimos de cómo la imagen de nuestra Patrona regresó a su ermita, no el primer domingo de octubre, sino en la mañana del día de San Blas, 3 de febrero. La respuesta: la imagen volvía tras las rogativas que se habían realizado, “porque no hace mucho derramó sobre los campos de Montijo toda la gracia que se ha merecido este pueblo”. Era un día como hoy, 3 de febrero de 1918, domingo. Por la mañana a Barbaño y por la tarde a gatear por el cerro de San Gregorio para degustar los primeros chorizos de la matanza y coger la flor del candil. Otro tanto hizo ese día, la imagen de Ntra. Señora de Botoa que, tras las rogativas, regresaba desde la iglesia pacense de Santo Domingo hasta su casa en la finca de Botoa. En el enlace del primer comentario podéis leer el texto del artículo en su totalidad.