LAS CAÑADAS Y VEREDAS DE FRAILES
POR MARÍA TERESA MURCIA CANO, CRONISTA OFICIAL DE FRAILES (JAÉN)
La ganadería en Frailes tradicionalmente, los dueños no se hallaban incorporados al Honrado Consejo de la Mesta, porque sus rebaños no eran trashumantes, aunque estos ganados se veían obligados a trasladarse en busca de los pastos, de ahí la importancia de las veredas y cañadas, de su buen estado para realizar esta trashumancia más local. Estos movimientos de ganado no solo se realizan dentro del propio término municipal, sino que con frecuencia se ampliaban hacia tierras de los concejos colindantes, eran los llamados ganados riberiegos.
Por lo que nos cuentan las Ordenanzas de Alcalá la Real1, recopiladas en 1552, los ganados que venían de fuera del los términos alcalaínos, debían quintarse, o sea contarse con el fin de pagar el impuesto correspondiente. Además estos ganados forasteros debían pasar por la cañada y les estaba prohibido entrar en las dehesas a pastar.
Estas ordenanzas nos informan como en 1538 se autoriza a los vecinos que tienen ganado de cabras u ovejas, puedan hacer corrales de chaparros, quejigos,o simplemente de ramajes, tales como espino, coscoja, o aulagas, como era costumbre, y estos corrales podían hacerlos en todo el término para recoger a las cabras o las ovejas. Con el paso del tiempo y en donde el terreno lo permitía se fueron haciendo de piedras, sobre todo en la sierra de La Martína, en donde aún se conservan algunos.
El 31 de diciembre de 15772 reunidos los 9 regidores, 4 jurados, el personero y el corregidor, ordenan y mandan, se haga un libro en el que se pongan todas las veredas, descansaderos y abrevaderos que están en los tres libros, a saber: el del corregidor Diego Arias de Anaya, del año 1495. El del corregidor Hernán Pérez de Torres que fue la visita que después de hizo, do se dió medidas a las veredas del bachiller Anaya. Año 1529. Y el libro del repartimiento de las 1.000 hanegas de tierra que dió a los vecinos el emperador Carlos y que repartió el corregidor Francisco de Alarcón, año 1527. Que toca a cada peón seis fanegas y media y a cada caballero trece.
Y es precisamente ese año de 1577 cuando desde el Cabildo de Alcalá la Real se manda hacer un libro de veredas que sí se conserva en el Archivo alcalaíno, se tata de un cuaderno de 60 folios escrito a doble cara y encuadernado que nos habla de veredas en el término de Alcalá la Real es el Libro de veredas3 y en el que ya aparece Frailes. Aunque hemos de incidir que en esa fecha Frailes era un lugar de apenas 60 vecinos en el que la mayor parte del terreno era monte de ahí que las únicas veredas que se señalen sea el camino que conduce desde la ciudad de Alcalá a Frailes, y otras de la zona de vega que hoy esta a la entrada de la localidad.
Dice así: Del camino que va de la Boca de Charilla a la Cueva del Moro sale una vereda desde el Portillo de la Boca de Charilla asoma al Salobral por el camino que va desde Alcalá a Frailes, este camino mide 33 estadales, y continua por tierras de propios hasta Vadochiquero4. Y desde Vadochiquero al río y a Cofrida. Todos estos toponímicos se conservan en fincas de Frailes.
Hay otra vereda que entra en Alcalá por los Llanos y llega al camino que va a Frailes su anchura es de 18 estadales. Según el Libro de veredas conservado en el Archivo alcalaíno.
Entre montes de Cofrida va el camino que va a Noalejo, y pasa por la Loma del Gato5. Hemos de tener en cuenta que en el siglo XVI, el sitio de Frailes como aparece en la documentación, pertenecía a Alcalá la Real, con un número pequeño de pobladores y con tierras ocupadas por el monte, de ahí que las referencias a Frailes sean hablando de los caminos que comunican con lugares del entorno, si bien, sí que aparece una vereda la llamada de Vega Cardosa, servidera de 10 pies de ancho y comienza en la loma de Bartolomé González de Montemolín. Y por último el citado cuaderno, informa del Camino que va desde Frailes a Alcalá6.
En el Archivo Histórico Nacional7 se conserva un expediente que se inicia a finales del siglo XIX y concluye en los albores del siglo XX y que vamos a estudiar por su interés para este tema. Se trata de diez hojas que llevan por título: El visitador de cañadas del partido de Alcalá la Real sobre que se autorice para hacer la visita de cañadas del pueblo de Frayles. Las fechas extremas del expediente van de 1860 a 1903, y ya en 1859, 26 de diciembre una carta que dirige Antonio Sánchez a el gobernador civil, en la que se le pide que ya que el alcalde de la Villa de Frailes había pedido que se presente el visitador del partido para abrir las coladas del término, y tras el fiasco que el anterior visitador, don José Rico, al no haber terminado su trabajo de hacer las nuevas veredas, solicita ser el, Antonio Sánchez el que realice el trabajo, con otro modo de abrir dichas vías.
Al año siguiente, 1860, desde Madrid, el marqués de Perales, contesta afirmativamente. Es decir que se proceda a la apertura de veredas y servidumbres pecuarias en el término municipal de Frayles. Aunque la persona autorizada cambia, ahora es Aquilino/Agustín Sánchez Molero, que también será el encargado de realizarlo en Alcaudete.
En el mismo expediente, pero ya en 1900, leemos: El delegado del gobernador para el deslinde de vías pecuarias de la provincia de Granada don Camilo Barros, en oficio que dirige a la presidencia con fecha 14 del actual (17 septiembre 1900) dice que la Cañada Real que pasa por el término de Trujillos (Granada), esta interceptada la mitad de ella por pertenecer al término de Frailes (Jaén), pues entre los dos términos dan la anchura de la referida cañada8.
El 13 de marzo de 1903 llega a la alcaldía constitucional de Frailes una carta del Gobernador de Jaén en la que solicita del alcalde, Indalecio Bolívar Serrano, copia certificada de cuantos antecedentes obran en el Archivo Municipal referentes a las mismas (vías pecuarias).
Nada referente a las vías pecuarias de Frailes se encontró en los archivos de Frailes, ni de Granada ni de Jaén, solamente el Archivo de Alcalá la Real guardaba los libros de veredas, aunque Frailes se independiza en 1836, si había alguna información de otras tiempos en los que ambas localidades estaban unidas. Pasamos a describir el documento:Unicamente en los testimonios de actuaciones de la Delegación de Alcalá la Real, se mencionan veredas que pasan por por Frailes sin marcar anchura y para que se pueda tener exacto conocimiento, paso a transcribirlas:
Desde el puente del Arroyo de Charilla sale otra vereda o servidumbre hasta llegar a el camino viejo que desde esta ciudad de Alcalá se dirige a la población de Frailes de su término la cual lleva diferentes anchuras.
Vereda o servidumbre que desde el camino viejo de Frailes baja hasta el nuevo y Cruz del Aren. Va llevando diferencia en su anchura.
En tomos del Instituto Geográfico aparecen que la imperfección de las vías pecuarias del término de Frailes es de 28 hectáreas, 14 áreas. Es cuanto puede manifestar el Archivo.9
En 1968, por Orden ministerial, se aprueba la clasificación de las Vías Pecuarias en los municpios españoles. Las Vías Pecuarias, en función de su anchura se clasifican en: Cañadas Reales (75,22m), Cordeles (37,61m), Veredas (20,89m) y Coladas (menor anchura que las Veredas). La Ley 3/95, de 23 de marzo de Vías Pecuarias, dispone la naturaleza jurídica demanial (carácter de Dominio Público) y atribuye su titularidad estableciendo los fines de la actuación de las Comunidades Autónomas en materia de Vías Pecuarias. Por el Decreto 155/1998 de 21 de julio se aprueba el Reglamento de Vías Pecuarias de la Comunidad Autónoma de Andalucía
Así por tanto, las Comunidades Autónomas son quienes tienen competencias en materia de regulación, deslinde, conservación de Vías Pecuarias. En Andalucía existen 5.202 Vías Pecuarias clasificadas, que se extienden en su territorio a lo largo de más de 34.000 km de longitud.
La Clasificación de 1968 de Vías Pecuarias en España tuvo dos consecuencias destacables: una muy positiva y otra muy negativa. La primera consecuencia fue el «blindaje» de dichos caminos públicos como tales. Es decir, que gracias a la Clasificación de 1968 hoy podemos disfrutar de un patrimonio público (ello a pesar de las habituales usurpaciones por parte de particulares) que de otro modo se hubiera quedado sistemáticamente en manos de terratenientes, de propiedarios de fincas rústicas. Sin embargo, con la Clasificación de 1968, se dotó a las Vías Pecuarias -por Ley- de una anchura determinada, y ello de manera sistemática para el conjunto de España: una Cañada Real tendría 75,22 metros de anchura ya estuviera en la Meseta Central o en las Cordilleras Béticas.
En el Archivo Municipal de Frailes, en sus siglas AMF se conserva el proyecto de vías pecuarias que se hizo en 1962, y que lleva por tíulo: Proyecto de clasificación de vías pecuarias del municipio de Frailes (Jaén). Autor: Julio Martínez de Saavedra y Tabernero. 196210
En la primera página encontramos La Memoria que informa del objeto del proyecto: Cumplimentando lo dispuesto por el Ilmo. Sr. Director General de Ganadería en orden de fecha 14 de julio del corriente año, el perito Agrícola del Estado D. Julio Martínez de Saavedra y Tabernero procedió a realizar los trabajos pertinentes para redactar el Proyecto de de Clasificación de las Vías Pecuarias existentes en el término Municipal de Frailes, una vez estudiados los datos relativos al término Municipal de Frailes, una vez estudiados los datos relativos a los términos limítrofes, los planos del instituto geográfico y Catastral y las informaciones de los prácticos testigos designados por las autoridades locales para estos trabajos.
Convocados el Ayuntamiento y la Hermandad Sindical para tratar sobre la clasificación de reforma de referencia y teniendo en cuenta sus opiniones y acuerdos reflejados en el Acta de fecha 30 de julio de este mismo año se procedió a la identificación de las Vías Pecuarias existentes en el término, que previamente habían sido recorridas por el Perito que suscribe acompañado de los prácticos indicados.
Estudiados detenidamente los trabajos llevados a cabo, se acordó unanimemente proponer que sean clasificadas, en principio, todas las vías pecuarias que integren el presente Proyecto como “NECESARIAS” a efectos legales, para que posteriormente y en momento oportuno, con mejores elementos de juicio para cada caso concreto, puedan ser fijadas las anchuras a que deben quedar reducidas en cada tramo, según aconsejen las necesidades reales del tránsito, mejoras establecidas o mejor utilización de éstos terrenos de dominio público. A las descripciones de itinerarios y propuestas de clasificación que siguen se acompaña el correspondiente croquis de situación en el término.
