ES UN FESTEJO SIMILAR AL QUE SE CELEBRA EN ALGUNOS PAÍSES DEL ENTORNO DE LOS BALCANES, DONDE EXISTEN ESTOS PERSONAJES, SEGÚN HA EXPLICADO EL CRONISTA OFICIAL DE ACEHÚCHE, SALVADOR CALVO
Las Carantoñas de Acehúche (Cáceres), que se celebran del 19 al 21 de enero en honor a San Sebastián, estrenan la declaración de Fiesta de Interés Turístico Nacional, conseguida en marzo del año pasado, con lo que esperan atraer a más visitantes a la localidad que cada año recibe la visita de entre 5.000 y 8.000 personas para disfrutar de esta tradición.
Así, unas 50 carantoñas desfilarán por las calles de la localidad, junto a los mayordomos, los tiraores, las regaoras, un tamborilero y la Vaca-Tora. Se trata de un festejo similar al que se celebra en algunos países del entorno de Los Balcanes como Yugoslavia, Servia, Bulgaria o Rumanía, donde existen estos personajes, según ha explicado el cronista oficial de Acehúche, Salvador Calvo.
Según cuenta la leyenda, San Sebastián fue un soldado condenado al martirio y abandonado en un árbol por no renegar de su fe cristiana. Sin embargo, las fieras del bosque que querían devorarlo se acercaron a él danzando a su pies y haciéndole carantoñas, según ha explicado Calvo en la presentación de la fiesta que ha tenido lugar este miércoles con la presencia de la diputada de Turismo de la Diputación de Cáceres, Patricia Valle, y el alcalde de la localidad, Benito Arias.
Las carantoñas se visten con pieles de animales, principalmente cabras, que se ciñen a la cintura, y se cubren la cabeza con una máscara, también de piel, en la que se pueden ver pimientos, orejas de animales, pero nunca cuernos.
Los trajes pesan unos 40 kilos y la programación de la fiesta comienza la víspera cuando a primera hora de la mañana el mayordomo y su familia recoge el romero, una planta que se esparce por las calles donde transcurre la procesión a la vez que resuenan los disparos de cohetes y el repique de campanas.
No obstante, el día grande es el día 20, cuando a partir de las 11,00 horas las carantoñas se concentran en las inmediaciones de la casa del mayordomo y salen hacia la iglesia, para esperar a que termine la misa a la que no pueden acudir. A las 12,00 horas sale el santo en procesión, escoltado por las fieras. A su paso por la casa del mayordomo se echará la ‘loa’, unas palabras que este último dedica al santo.
Fuente: https://www.lavanguardia.com/