COFRADÍAS Y ASOCIACIONES DE VECINOS ATRAEN A SUS BARRAS A PÚBLICO DE TODAS LAS EDADES, QUE DISFRUTA CON BAILES Y DEGUSTACIONES
Farolillos, trajes de faralaes, bailes por sevillanas… y mucha, mucha gente. La celebración de las Cruces de Mayo sacó en la noche del viernes y durante el sábado a miles de personas al centro histórico de Cartagena.
Desde la mañana hasta la madrugada, las 35 instalaciones montadas por bares, restaurantes, asociaciones de vecinos y cofradías religiosas (como las de Semana Santa y la de San Ginés de la Jara) atrajeron a público de todas las edades, al que han sumaron grupos de turistas.
Entre éstos, hubo cientos de pasajeros -entre ellos numerosos japoneses- de los trasatlánticos ‘Monarch’ e ‘Infinity’, que después de visitar el Teatro Romano agradecieron con entusiasmo el inesperado bullicio ‘typical spanish’. Estos cruceros, con 4.694 pasajeros a bordo en total, hicieron escala en el puerto desde primera hora de la mañana hasta la tarde.
Plazas como San Francisco, San Ginés Castellini y calles como Jara, Honda y Aire aglutinaron buena parte del ambiente, en unas fiestas que acaban hoy y en las que el Ayuntamiento de Cartagena ha incrementado los controles antirruido. Con ello, busca compaginar el derecho al descanso de los vecinos con el fomento de la actividad de los hosteleros, que ponen música con altavoces y programan conciertos.
Tras las protestas protagonizadas el viernes por algunos empresarios, ante el retraso en la concesión de licencias y lo que consideran medidas demasiado restrictivas, la prohibición de poner música ambiente entre las tres y media y las cinco y media de la tarde fue cumplida, de forma desigual. Uno de los lugares donde, hacia las cinco de la tarde, había música era la calle Honda.
Controles antirruido
Además, según fuentes municipales el viernes las quejas vecinales llevaron al Ayuntamiento a detectar, con un medidor homologado, un nivel excesivo de volumen en un concierto celebrado en la Glorieta. Los responsables del evento tuvieron que rebajar los decibelios, para ajustarse a la normativa.
En las Cruces, que abarcan los barrios y las diputaciones, destacan por su tradición las de las cofradías pasionales ante sus sedes. La organización corre a cargo de grupos de jóvenes y los ingresos por la explotación de las cantinas van destinados a fines sociales. Jose Alberto González
Fuente: http://www.laverdad.es/murcia/cartagena/cruces-mayo-cruceros-20180505181635-nt.html