POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
Hay polvorones, turrones y mantecados en los escaparates de las pastelerías. El obrador del convento de las hijas de Santa Clara sabe a almendra, limón, azúcar, miel y canela. Llega la Navidad de los nacimientos con montes de corcho, figuritas de pastores y lavanderas en ríos de papel de plata. La Navidad de los aguinaldos, los polvorones y las culebras de mazapán que ahora evoco en las dulcerías de la edad de la infancia.