POR JUAN JESÚS DÍEZ SANZ, CRONISTA OFICIAL DE AGUILAFUENTE (SEGOVIA)

El 9 de Mayo de 1987, se han cumplido 33 años de la grabación de la primera cinta de cassette, de los grupos de danzas de paloteo, que se habían recuperado, pocos años antes, en la villa de Aguilafuente.

Era tan grande la ilusión, confianza y soltura del grupo de músicos y danzantes de aquellos días, que decidieron, nada más y nada menos, que grabar una cinta para la divulgación de este patrimonio cultural, felizmente, recuperado.

Así, tres dulzaineros y un redoblante tocaron la música de 14 paloteos, 7 por la cara A y 7 por la B; 8 danzantes chocaron sus palos, a la vez que hacían coreografías, que volvían de épocas pasadas, ya recuperadas.

Los nombres de estos intrépidos jóvenes están en la carátula de la cinta, que se aprecian en estas fotografías.

Otros, también aportamos nuestro granito, con comentarios históricos de los orígenes de estos paloteos, aunque no había mucha documentación al respecto.

Lo curioso del tema es que se grabó en el mismo Aguilafuente, por un sello discográfico independiente, ubicado en Madrid, TECNOSAGA S.A., quien desplazó a sus técnicos a la discoteca TOYS de la localidad, la cual contaba con equipos de sonido y una acústica de gran calidad.

Como muchas personas jóvenes desconocen la existencia de esta discoteca, y otros más maduros les gustaría recordar alguna anécdota vivida entre aquellas paredes de modernismo y ruptura, de las costumbres conservadoras de los tiempos anteriores, me he decidido a dar unas pequeñas pinceladas para el recuerdo.

Isabel Martín Torrego, allá por el 1975 decide abrir este estupendo servicio, para una población ligeramente superior a los mil habitantes.

Contaba Aguilafuente con una Academia de la Policía Nacional de unos doscientos miembros, algunos encontraron el amor de su vida en esta discoteca.

Constaba de un recibidor-entrada con su taquilla, la entrada controlada por un portero y un ropero.

Pasado este espacio, a mano izquierda, había una preciosa barra metálica con estanterías de cristal,cargada de botellas para los «cubatas».

A través de un pasillo, se llegaba a la pista de baile con su correspondiente bola de cristal, reflejando en el suelo la luz, y separada de los «reservados «por unos listones de madera que daban gran sensación de elegancia, acompañados de sillones bajos muy mullidos.

El corazón de la discoteca era la cabina de discos, con sus mezcladores de sonido de lo mejor del mercado. Al mando estaba el entusiasta Ángel Arribas Gilmartin.

Hubo años felices, acudiendo gente de la zona a sus concursos de disfraces, Navidades, San Frutos.

Cerró la Academia de Policía, comenzó una fuerte despoblación de jóvenes a trabajar y estudiar fuera de la localidad y los inviernos se hicieron muy largos.

Se alquiló a diferentes personas, eran los años ochenta.

La última etapa 1994- 2004, recuperó su importancia para la población emigrante de búlgaros y rumanos de la zona.

Los sábados era el lugar de reunión de jóvenes venidos de Cantalejo, Cuéllar, Albacete, Zaragoza, etc.

Comenzó la competencia con la discoteca de Navas de la Asunción, disminuyendo el negocio.

Rocío Criado Martín, hija de la familia propietaria de la discoteca, que en estos años la regento, decide cerrarla, allá por el 2004, transformándose con el tiempo en el supermercado de alimentación que hoy es.

Antes de terminar , quiero recordar la existencia del PUB que se creó, años después, al lado de la discoteca, por el buen gusto con el que se hizo,también por la familia de Isabel Martín Torrego.

Pero el pasado no vuelve y el futuro no sabemos lo que traerá, en nuestro presente disfrutamos de un necesario supermercado que cumple una labor, tan importante, como en su día la discoteca y el PUB, adaptémonos al presente.