EL CRONISTA OFICIAL DE GÁLDAR, JUAN SEBASTIÁN LÓPEZ VISITÓ VARIOS LUGARES CON ESTUDIANTES DE LA UNIVERSIDAD PARA HACER UN POSTERIOR ESTUDIO
La tierra es agradecida y las últimas lluvias caídas ya se notan en el paisaje grancanario, sobre todo en la zona de Medianías.
Tomar la carretera GC-220 desde Hoya de Pineda y subir hasta Caideros de Gáldar es todo un espectáculo. Por el camino, pocos lugareños, pero los que uno encuentra al paso están o bien trabajando los cultivos, o atendiendo a los animales, o haciendo queso, o limpiando las fincas…
Siempre hay algo que hacer. Da igual la climatología. Estos días ha habido una considerable bajada de las temperaturas, aunque para los vecinos de las Medianías sea poca cosa. No hay frío, según dicen. Pepe Torres, conocido vecino de Caideros, apunta que aunque ha llovido y se agradece, no ha sido para tanto. «El tiempo está tranquilo, aunque hay señales de agua.
El Teide se ve con una capota y eso es seña de agua».«Estoy en manga corta, con una camisa corriente», dice Pepe Torres retando a un termómetro que roza los 15 grados, aunque la sensación térmica siempre por Caideros es de más frío. Aunque él dice que «en la Cumbre sí que hace frío, cinco grados esta semana que estuve recogiendo castañas con unos amigos. En todo caso, «aquí estamos contentos, con el campo cada vez más bonito. Bueno, en realidad toda Gran Canaria está preciosa» este otoño.
Los viejos del lugar, sigue la conversación el líder vecinal de Caideros, «dicen que hacía años que no había una otoñada tan buena. Llueve todos los días, de día o de noche, lo que no ha llovido es para llenar presas», pero sí para ayudar a los agricultores y para dejar el campo verde.
Otra cosas es que los canarios sepamos apreciar lo que tenemos, dice Torres. Esta misma semana un nutrido grupo de estudiantes de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, incluidos algunos procedentes de la Península, acompañados del cronista oficial de Gáldar, Juan Sebastián López, visitaron Caideros para realizar un posterior estudio. «Se quedaron maravillados de los parajes» que ofrecen las Medianías, del patrimonio etnográfico y cultural de la zona, cuenta con orgullo Pepe Torres.
Poco antes de llegar a Caideros, que está de enhorabuena porque en breve abordará una serie de proyectos de mejora para atraer sobre todo visitantes, se encuentra la quesería familiar El Montañón. Cae una lluvia que cala pero que parece no va con David Moreno, que tiene una larga lista de tareas por acometer.
Desde limpiar la zona de los animales, 300 entre cabras y ovejas, a dar de comer a los corderos. «Aquí no hace frío», apunta, «pero se agradece que haya llovido más que otros años. Cambia la cosa». Su madre, Flora Gil, se ha levantado a las cinco de la mañana para bajar en guagua a la capital. Está ya de vuelta, es casi la una.
«Por no tener carnet ni chófer», se ríe, «llevo desde las siete fuera, y hoy tuve suerte, si se me escapa la guagua llegó aquí a las dos y media». Entonces se percata de que está lloviendo y abre el paraguas. «Hace falta que llueva, pero sin destrozos». P. Vidanes
Fuente: https://www.canarias7.es/siete-islas/gran-canaria/las-lluvias-dan-paso-al-mejor-verde-BC5949443