LES HISTORIES DE FIDALGO – DÍAS DE SANTOS , DE DIFUNTOS …Y DE DULCES.-
POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Resumiré la historia , apartándome un poco de tradiciones celtas, de las celebraciones católicas -a mejor decir, cristianas- de las llamadas FIESTA DE TODOS LOS SANTOS y DÍA DE LOS DIFUNTOS.
1.- TODOS LOS SANTOS.- Desde los primeros tiempos del cristianismo , tiempos de persecución y martirio, los cristianos acostumbraron a recordar a sus mártires con una «fiesta» especialmente dedicada a ellos. A partir del siglo IV esta costumbre fue generalizándose y , ya en el siglo VII , el Papa Bonifacio IV fijó el 13 de mayo como fecha para ese día de celebración.
Fue en el siglo VIII cuando el Papa Gregorio III «amplió» el recuerdo a TODOS LOS SANTOS , mártires o no , manteniendo el día de celebración, que en tiempos del siglo IX, fue trasladado al 1 de noviembre por el Papa Gregorio IV.
Por su parte, las iglesias cristianas de rito ortodoxo y bizantino celebran esa festividad el primer domingo de Pentecostés.
2.- DIA DE DIFUNTOS.-Fue costumbre en los monasterios benedictinos destinar un día al recuerdo de sus monjes fallecidos ; celebración que por iniciativa del abad de Cluny, Odilón, se amplió a todos los FIELES DIFUNTOS . Sucedió esto en el año 990 y la Iglesia adoptó esta costumbre extendiéndola por todo el mundo a partir del siglo XVI , fijando su fecha para el 2 de noviembre ; día siguiente al de la festividad de Todos los Santos.
Bueno, bueno, bueno…
Pues cumpliendo lo que decía el poeta que : «Una cosa es la amistad/ y el negocio es otra cosa» , las gentes , creyentes o no, juntaron en su «quehacer» creencias y devociones cristianas con costumbres y tradiciones ancestrales anteriores al cristianismo.
Y así , combinan misas, responsos, visitas a cementerios y flores a los muertos, con mascaradas, brujerías, sustos de horror…¡Yo qué sé!
Y , otra vez más , «misa y mesa» -es decir, creencia y comida- se dan la mano «en santa compaña» (y nunca mejor dicho) en estos días de recuerdo a los «que ya no están en este mundo». Las DULCERÍAS son laas grandes protagonistas en estas celebraciones. En Andalucía y Extremadura, por ejemplo, no pueden faltar las GACHAS DULCES, que llaman «poleás» ; en Asturias, es otro ejemplo, siempre han de estar presentes las TERESICAS y los BUÑUELOS… Y en todo el territorio español los HUESOS DE SANTO son dulce obligado en obradores y confiterías.-
Como no es cuestión de ofrecer un recetario total de tanta dulcería, me limitaré a dos de fácil elaboración.
.- GACHAS DULCES EXTREMEÑAS.-
En un cazo grande, al fuego, «tuesten» ligeramente unas 3 o 4 cucharadas de harina de trigoy de inmediato agreguen 1/4 de litro de agua mezclado con otro 1/4 litro de leche entera. Mezclen bien y dejen cocer, removiendo continuamente, evitando que se formen grumos y que se pegue al fondo.
Cuando empiece a espesar añadan azúcar ( entre 3 y 5 cucharadas, al gusto), un chorrito de anís (o una cucharadita de «anisinos») y otro de aguardiente y prosigan la cocción a fuego mediano.
Ya ern su punto , distribuyan las gachas en cuencos de ración individual y complementen cada uno con unos «dados» de pan frito y un espolvoreo de canela.-
.- TERESICAS DE SARTÉN.-
En un cazo, al fuego, den un hervor a una mezcla de un vasito de vino blanco y otro de agua, una pizca de sal, un poco de mantequilla (1 cucharadita) y otro poco de azúcar. Cuando esté todo bien disuelto, retiren y, ya templado, agreguen un poco de levadura (unos 3-5 g).
Amasen 300 g de harina con esta mezcla hasta tener una masa compacta y moldeable , a la que deben agregar unos 75-100 g de mantequilla. Sigan el amasado y dejen reposar un tiempo en lugar fresco.
Estiren la masa en láminas finas y corten tiras de unos 6 cm de ancho por 10 cm de largo. Rellenen cada una con crema pastelera, cerrando a modo de empanadilla de forma cuadrada.
Frían en aceite muy caliente hasta dorar y, ya fritas, espolvoreen con azúcar..-
Pues ya lo saben. Olvídense del «Jalogüín» y del «San Malgín», de «los trucos y de los tratos. Recen por sus muertos y recuerden con cariño su presencia en la Tierra ; y ese recuerdo , que ha de ser dulce, acrecéntenlo con la dulcería tradicional de su comarca.
FUENTE: https://www.facebook.com/LesHistoriesdeFidalgo
