POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS).
Lo que son las cosas. Buscando romances antiguos relacionadas con la Navidad encontré uno, que desconocía, en el que al jugar con la polisemia de la palabra LIBRO nos adentra en el mensaje que supone la maternidad de Maria y el nacimiento de su Hijo.
Es romance del siglo XVII y éste es su texto:
Pero no quedó aquí la cosa. Mi sorpresa fue doble al saber que en Sevilla existe una calle dedicada a la VIRGEN DE LOS BUENOS LIBROS y que está advocación mariana, muy fomentada por los frailes Capuchinos, tiene larga tradición en la Iglesia Católica.
Tanto es así que a Nuestra Señora de los Buenos Libros se le asignó el patronazgo de estudiantes, lectores, bibliotecarios, documentalistas, escritores, editores…
Ah! Si ustedes van a Murcia capital no dejen de visitar la Iglesia franciscana de San Francisco de Asís. En ella se venera una imagen de la VIRGEN DE LOS BUENOS LIBROS, obra del escultor Juan González Moreno (1908-1996), que aquí reproducimos en fotografía.
Otra de las fotos reproduce un mosaico de esa Virgen y otra más corresponde a un cuadro de Botticelli.
Un servidor, lector «de todo» y autor de textos de Física, Química y «qué se yo», se acoge con fervor a ese, para mi, nuevo patronazgo.
El romance anónimo que cité será mi oración de esta noche.