POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Se titula “Lion” y lamento que no sé ponga “León”; el original, “A Long Way Home”, de Garth Davis, se basa en una historia real y reciente, escrita por Saroo Brierley, el protagonista, que se perdió en la India a los cinco años, fue adoptado por un matrimonio australiano (Nicole Kidman en la ficción) y veinte años después busca a su madre y su casa natal. La primera parte, exótica, con formato de documental, casi sin palabras, y con muy buen ruido, que narra la infancia de Saroo en los suburbios de Khandwa y Calcuta, es muy interesante; cuando llegamos a Australia, el relato se vuelve convencional; la familia, la novia y la Universidad le quitan fuerza a Saroo, raya la cursilería y quedan cabos sueltos. Con el regreso a casa cobra fuerza, y conmueve el rendimiento que autor y director sacan a Google Earth. La magia se diluye cuando los créditos del final piden limosna para una ONG.
Fuente: http://www.lne.es/