UNAS NOVENTA PERSONAS ABARROTARON LA SALA PARA ESCUCHAR LAS INTERVENCIONES DE JOSÉ ANTONIO FIDALGO, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA, Y AL PERIODISTA JOSÉ ANTONIO OLIVAR, SUBDIRECTOR DE HOLA
La sala de ventas de la Cofradía de Pescadores de Lastres se quedó pequeña para recordar la figura del matemático llastrín Agustín de Pedrayes. Unas noventa personas abarrotaron la sala para escuchar las intervenciones de José Antonio Fidalgo, cronista oficial de Colunga, y al periodista José Antonio Olivar, subdirector de Hola y paisano del matemático contemporáneo de Jovellanos y Caveda. Ambos coincidieron en reconocer el carácter singular de la figura de este “paisano” y sus aportaciones a la modernidad en un siglo, el XVIII, marcado en Europa por los avances en el conocimiento y en el afán de desarrollar un saber práctico. También coincidieron ambos, lamentablemente, en lamentar el desconocimiento y la desidia de toda una comunidad para “presumir” de la memoria de uno de sus más grandes “hombres”.
La asociación Cubera, premio Pueblo Ejemplar de Asturias en 1991, y la confederación de asociaciones llastrinas, que fueron merecedoras del mismo galardón en 2010, organizaron la presentación del número 48 de la revista CUBERA en la localidad natal de Agustín de Pedrayes, coincidiendo con la celebración del segundo centenario de su fallecimiento.
El acto contó con la presencia de Pedro Sanjurjo, presidente de la Junta General del Principado, de Luis Venta, diputado en la misma Junta, y de una nutrida representación de alcaldes o concejales de los diferentes ayuntamientos de la Comarca de la Sidra. Por la parte académica, también participaron del acto el decano de la Facultad de Matemáticas, un nutrido grupo de representantes de la Sociedad Asturiana de Educación Matemática “Agustín de Pedrayes”, el profesor de la Universidad Autónoma de Madrid, David Rivas o el también profesor Xuan Xosé Sánchez Vicente. Al finalizar el acto, tomó la palabra el catedrático de Álgebra de la Universidad de Oviedo, Santos González, quien recordó que en breve se cumplirán los 25 años de la creación de la primera cátedra de Matemáticas en la universidad ovetense, siempre a la sombra de Agustín de Pedrayes, el matemático más ilustre de esta ciencia en España durante varios siglos.
Agustín B. Pedrayes y Foyo
Nació en La Salgar, Llastres el 28 de agosto de 1744. Fue hijo del médico Emeterio Pedrayes y de Manuela del Foyo, ambos naturales de Llué. Es bautizado en Llastres el día 29, en la parroquia de Santa María de Sádaba.
Estudió las primeras letras en Llastres y humanidades en Colunga con un preceptor José Vicente Mejía. Fundamental en su formación fue la acción de su tío fray Bernardo Foyo, benedictino; se matricula en la universidadde Santiago, donde estudia Filosofía, Teología y Jurisprudencia.
1769.- Es nombrado Maestro de Matemáticas de la Real Casa de Caballeros Pages de Su Magestad. En ese tiempo estudia los tratados más recientes de Mecánica, Geodesia y Mineralogía.
1777.- Escribe Nuevo y original método de quadraturas determinadas, 280 páginas hasta ahora inéditas, aunque está anunciada su pronta edición crítica.
1790.- Resentida su salud, se recoge en Llastres, tiempo que ocupó en cuidar a su madre enferma.
1794.- Conoce a Jovellanos, del que será confidente intelectual y colaborador en el Instituto de Gijón.
1795.- Comunica su decisión de volver a Madrid. “Lo siento por él, a quien incomodarán y por esta escuela a que pudiera ayudar mucho… Mi grande amigo Pedrayes se va a Madrid…” (Jovellanos).
1798.- Por invitación del gobierno francés fue nombrado representante de España para concurrir con los sabios designados para fijar el fundamento de un nuevo sistema de pesas y medidas que, por su sencillez, claridad y precisión, pudiera sustituir ventajosamente a los usados en todas las naciones.
Durante los dos años de París dedicó tiempo para la publicación de Tratado de Matemáticas. A su regreso en 1801 se le rindieron honores y distinciones. Sus trabajos le colocan a la cabeza del movimiento científico de la época.
El rey José Bonaparte le incluyó en un censo de 86 hombres sabios.
Pedrayes no se avino a colaborar y se fue a Cádiz, donde le amparó la Regencia del Reino. Fallece en Madrid (25 febrero 1815), en casi total abandono, durante el reinado de Fernando VII.
Fuente: http://villaviciosahermosa.com/