POR MARÍA DEL CARMEN CALDERÓN BERROCAL, CRONISTA OFICIAL DE CABEZA LA VACA (BADAJOZ)
Hay expresiones en el Pueblo tales como «Llora más que Jeremías», refiriéndose a un niño que llora mucho o a una persona que se queja mucho. Pero… quién fue Jeremías. Veamos:
Jeremías es un profeta de la Nueva Alianza.
Jeremías es una de las figuras más destacadas en la tradición profética del judaísmo. Su ministerio, desarrollado en un período crucial del siglo VII a.C., y sus escritos, particularmente el anuncio de una «Nueva Alianza», han tenido un impacto significativo no solo en la fe judía sino también en el desarrollo del cristianismo. Este análisis explora la vida, ministerio y legado de Jeremías, así como la estructura y formación de su libro.
Vida y Ministerio de Jeremías
Nacido en una familia sacerdotal, Jeremías comenzó su ministerio profético alrededor del año 627 a.C., poco antes de la reforma religiosa impulsada por el rey Josías en 622 a.C. Aunque los detalles sobre los primeros años de su actividad son limitados, se cree que apoyó la reforma en la medida en que ésta implicaba una purificación de las prácticas idolátricas.
Sin embargo, Jeremías criticó la confianza excesiva en la Ley y el Templo cuando no iba acompañada de una renovación moral y espiritual profunda.
Durante el reinado de Joyaquim (609-598 a.C.), Judá experimentó un período de aparente estabilidad bajo la influencia de Egipto.
Jeremías, sin embargo, advirtió sobre la fragilidad de esta seguridad y predijo la caída de Judá debido a su infidelidad a Dios. Sus advertencias se materializaron cuando Babilonia derrotó a Egipto en 605 a.C.; y, poco después, sitió Jerusalén en 597 a.C. A pesar de la desesperada situación, algunos proponían una alianza con Egipto y otras naciones vecinas para resistir a Babilonia, una estrategia que Jeremías denunció como contraria a la fidelidad a Dios.
El Conflicto y la Crisis
La situación se deterioró cuando el ejército babilonio ocupó Jerusalén en 587 a.C., y gran parte del pueblo fue deportado. Jeremías, que había sido acusado de ser pro-babilonio por su oposición a alianzas humanas, vio cumplirse sus advertencias.
Pero, en medio de la destrucción, comenzó a ofrecer un mensaje de esperanza, prometiendo el eventual retorno de Israel a su tierra.
Este mensaje, aunque alentador, no se cumpliría inmediatamente y Jeremías mismo fue llevado a Egipto contra su voluntad, donde probablemente murió.
Formación y Estructura del Libro de Jeremías
El libro de Jeremías se estructura en varias secciones.
La primera parte (capítulos 1-25) incluye los oráculos contra Judá,
seguidos por una sección que relata episodios de la vida del profeta y oráculos positivos hacia Israel y Judá (capítulos 26-45).
Luego, se presenta una recopilación de oráculos contra las naciones (capítulos 46-51), y finalmente, un apéndice histórico sobre la caída de Jerusalén (capítulo 52).
El proceso de formación del libro fue complejo. Según el capítulo 36, Jeremías recibió la orden de escribir en un rollo todos los oráculos pronunciados sobre Israel, Judá y otros pueblos, comprendidos entre los reinados de Josías y Joyaquim.
Este rollo original fue destruido y reescrito, con adiciones que forman la primera parte del libro.
La segunda sección, que se atribuye a menudo a su escriba Baruc, incluye datos biográficos y conflictos de Jeremías con las autoridades religiosas y políticas.
Los oráculos contra las naciones probablemente se añadieron después de la caída de Babilonia, incorporando material que puede haberse originado con Jeremías.
El Legado de Jeremías
Jeremías es recordado por su profunda conexión con Dios, a pesar de las incomprensiones y persecuciones que enfrentó.
Su relación con Dios se expresa en las conocidas «confesiones» de Jeremías, donde revela su lucha interna y su devoción inquebrantable.
Estas experiencias personales le permitieron desarrollar una «teología de la historia», interpretando los acontecimientos históricos como expresiones de la soberanía y fidelidad de Dios.
Una de las contribuciones más significativas de Jeremías es su anuncio de una nueva alianza, que no estaría basada en el cumplimiento externo de la ley, sino en una adhesión interior y sincera a Dios. Este concepto ha influido profundamente en la teología judía y cristiana, especialmente en el desarrollo de ideas mesiánicas y en la comprensión de la soberanía de Dios sobre la historia.
Jeremías es una figura fundamental en la historia religiosa de Israel.
Su vida y obra ofrecen una visión profunda de la interacción entre la fe, la política y la historia en tiempos de crisis.
Su anuncio de una nueva alianza y su interpretación teológica de la historia han dejado un legado duradero, que sigue influyendo en la teología y la espiritualidad contemporáneas. Seguramente el dicho «Lloras más que Jeremías» venga del carácter reivindicativo de este personaje histórico.
FUENTE: https://cabeza-la-vaca.blogspot.com/2024/08/lloras-mas-que-jeremias-dicho-popular.html