POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Hace unos días publicó GRACIELA PRIETO una fotografía antigua de lo que antaño fuera en Colunga la confitería LA FLOR, propiedad de don GERÓNIMO GONZÁLEZ. La planta baja de ese edificio -hablo de los años posteriores a la Guerra Civil- fue destino de un bar-cafetería conocido como «EL BODEGUERO» (no recuerdo los nombres de quienes lo regentaron, pero sí de sus hijos Alicia y Luis); después, ya cerrado el bar, pasó a ser sede de las oficinas de ERCOA S.A. HIDROELÉCTRICA DEL CANTÁBRICO S.A. y finalmente es el local conocido popularmente como «TODO A CIEN», explotado por la familia Toyos.
El 8 de septiembre de 1897 don Gerónimo González insertó un anuncio publicitario en LA OPINIÓN, de Villaviciosa, ofertando sus productos dulceros para la «cercana» Navidad.
Merece la pena recordar los precios que, ¡asómbrense!, se expresan en «reales de vellón».
NOTA.- Este anuncio fue reproducido por mí en mi libro, ya agotado, RECUERDO Y NOSTALGIA DE COLUNGA (Edic. La Cruz de Grado. Oviedo 2014).