MEMORIA INFORMATIVA DE VILLANUEVA DEL ARZOBISPO. AÑO 1964 (I)
Abr 17 2024

POR MANUEL LÓPEZ FERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DEL ARZOBISPO (JAÉN)

La obligatoriedad de enviar a distintas administraciones, una Memoria de los distintos apartados de la vida local, nos aproxima a la historia, vida, actividades y personas que intervienen.

Divide la Memoria en seis apartados que iremos, resumiendo con los datos que considero más destacados: Historia de la Ciudad, Vida Económica, Red de Comunicaciones, Organización y actividades generales del Ayuntamiento, Servicios Municipales y Hacienda Municipal.

Historia de la Ciudad

A lo largo de 15 páginas, hace un perfecto recorrido por parte de la historia local:” En sus orígenes la historia de Villanueva figura indisolublemente unida a la de Iznatoraf. Un núcleo poblado llamado La Moraleja, que se convertirá en Villa independiente , con el nombre de Villanueva del Arzobispo en el 1396.

Puede afirmase que Fernando III el Santo conquistó Iznatoraf en el verano de 1.226. En 1230 le llegó la noticia de la toma de Quesada por los moros. En 1231 expidió un privilegio rodado, a D. Rodrigo Ximénez de Rada, Arzobispo de Toledo, donando a la Mitra Toledana, los territorios de Quesada y Toya para que el Arzobispo los conquistase, naciendo así el llamado Adelantamiento de Cazorla.

A las tres villas que inicialmente formaban el Adelantamiento de Cazorla, es decir Cazorla, Iznatoraf y La Iruela, se agregaron en 1396 Villanueva del Arzobispo, medio siglo más tarde, el Arzobispo Carrillo, convirtió el lugar llamado Torre de Mingo Priego en Villacarrillo y más tarde el lugar de Sorihuela, ya en la edad moderna , se convierte en villa.

El Arzobispo D. Pedro Tenorio en 1396, concede a Villanueva del Arzobispo, fuero propio, mercado un día a la semana, ordenanzas, sello  y armas, y la obligatoriedad de amurallar la villa. Se concede también a la villa pendón de batalla y las armas, con la imagen de la Virgen y a los pies de ella un león rampante.

En 1411 los hombres buenos de Iznatoraf y Villanueva del Arzobispo , se quejaron al Adelantado de Cazorla D. Alfonso Tenorio, que el Mayordomo, Pedro de Madrid había mandado labrar y sembrar las tierras denominadas de Portugal, El Barco… en la ribera del Guadalimar, reservándose para si las rentas devengadas, con gran daño para los vecinos. Siendo Adelantado D. Juan Martinez Contreras-1422-1434. El año de comienzo de su Pontificado, se desencadenó una terrible peste en el Adelantamiento, que afectó especialmente a las villas de Iznatoraf y Villanueva. Fue tal la mortandad causada por la epidemia,que el Arzobispo ordenó que se confeccionasen nuevos padrones de habitantes por haberse quedado anticuados los anteriores.

El Rey D. Juan II ordenó graves levas de tropas que afectaron al Adelantamiento, los habitantes de Villanueva que temían quedarse desguarnecidos en territorio fronterizo escribieron al Adelantado para que hiciese ver al Rey,el temor de dejar la zona sin tropas suficientes. El Arzobispo contestó que de todo estaba informado el Rey, y les prometía mejoras y privilegios para el futuro, pero que debían con sus tropas reunirse con el Monarca.

Al visitar en 1511, la villa de Sorihuela, el Cardenal Cisneros, ante las quejas de los vecinos de esta villa, mandó que en las murallas de Villanueva se abriera un portillo y se pusieran puertas en él, en la parte lindante con Sorihuela para que pudieran acogerse por este los vecinos de Sorihuela que trabajaban sus heredades, evitándoles así el tener que rodear la muralla cuya puerta principal, como es lógico suponer daba al Sur.

Durante la guerra de las Comunidades, Villanueva debió manifestar sus simpatías por los Comuneros, puesto que de todo el Adelantamiento únicamente la Iruela e Iznatoraf fueron premiadas por su fidelidad al Monarca, la primera recibió el privilegio de poder denominarse ; “Noble y Leal Villa, ayuda y favor de los Adelantados de Cazorla” y la segunda, “Noble y Leal Villa de Iznatoraf, guarda y amparo de los Adelantados de Cazorla”.

Es evidente  que debió ser pujante la vida de los vecinos del Adelantado durante estos siglos, ya que la riqueza agrícola de sus territorios así lo imponía; no es por tanto extraño que al producirse el llamado pleito del Adelantado Cobos, pudiera decirse que “no hay señor ni grande en España que tenga tal calificado ni fuerte estado, porque son seis Villas muy principales y muy fuertes, de las cuales , en tiempo de cinco horas se pueden juntar cuatro mil valientes soldado y casi mil de a caballo, de los mejores de España, los cuales muy mejor responderán a la Corona Real en tiempo de necesidad.

En un manuscrito existente en la Biblioteca Nacional y atribuido a Juan Bautista Pérez, entre 1609 y 1615, se atribuye a Villanueva1,200 vecinos, 400 a Iznatoraf, 200 a Sorihuela y 1.400 a Villacarrillo.

En el siglo XVIII, durante el pontificado del Cardenal Aragón realizó un viaje por el Adelantamiento y parece ser que existían numerosos ladrones y bandoleros por la serranía de la comarca, como lo acredita que un tal Pedro Valenzuela, Capitán de bandidos célebres en la comarca, se entregara a la bondad del Cardenal, quien mientras tramitaba el indulto  lo recluyó en el Convento de Basilios de Villanueva. (1) 

 De enero de 1810 a junio de 1812, soportaron los habitantes del Adelantamiento  las amenazas y luchas con los ejércitos franceses, acampados en Andalucía, y que penetraron hasta Cazorla. Lo accidentado de la Sierra de Cazorla y de las Cuatro Villas, favoreció las guerra de guerrillas, que no finalizaron hasta que abandonaron los ejércitos de Napoleón los campos del Adelantamiento.

Con las Cortes de Cádiz de 1812 se terminó la jurisdicción especial  de la Mitra Toledana sobre los territorios del Adelantamiento , finalizando así un régimen que había perdurado durante seis siglos. 

Este es un resumen del texto, que el culto secretario de la localidad D. Luis Errazquiz María  Angulo escribe este apartado de la historia local, citando su fuente documental de la obra de J.F. Rivera Recio, “El Adelantamiento de Cazorla”.

1.- ( El Santuario extramuros de Nuestra Señora de la Fuensanta, había estado a cargo de los carmelitas. Por las celdas del lugar pasó y pernoctó San Juan de la Cruz, que llegó a orillas del Guadalquivir al convento de “El Calvario”. Parece que por motivos de salud tuvieron que dejar ser los guardianes de la Virgen de la Fuensanta.

Se pensó entregar la custodia del Santuario a otra orden religiosa, los hijos del patriarca San Basilio, que obtenidas las licencias de su Majestad y del Obispo don Sancho Dávila y Toledo, entraron en el lugar en el año 1.611. Aquí vivieron durante algunos años el fervor que toda la comarca tenía a la imagen y las numerosas peregrinaciones que llegaban desde distintos lugares de España. Bajan a la ciudad y conocen un convento, que pensado para ser regentado por los dominicos, no obtuvo el permiso del obispo.

La humedad que la comunidad soporta en el Santuario y sufrir diversas enfermedades motiva, que el año 1.618 se trasladen al Monasterio de la localidad, que se llamará de San Basilio “ (López Fernández Manuel, I y II Jornadas Histórico Artísticas de Villanueva del Arzobispo. Junio 1987)

FUENTE: M.L.F.

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