POR FRANCISCO JOSÉ ROZADA MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE PARRES-ARRIONDAS (ASTURIAS)

-A veces se pagaban con retraso ciertas deudas, como le ocurrió al famoso gaitero José Remis Vega (1880-1963) al que -en junio de 1954- se le abonaron las 125 pts. que le debían por haber tocado en la Fiesta de las Piraguas…dos años antes.

El que era conocido como el gaitero de Margolles, había nacido en Sevares (Piloña), se casó a los 17 años con Ramona Ovalle, una moza de Margolles (Cangas de Onís), con la que llegó a tener quince hijos. Creador de una auténtica escuela de gaiteros, acabó siendo elegido por la Casa Real como ´gaitero mayor de palacio´, actuando en banquetes y otros actos oficiales.

Se dice que José Remis Vega tocó durante 60 años consecutivos en la procesión de la Virgen de Covadonga, cada 8 de septiembre. Su hijo, José Remis Ovalle, conseguiría en 1970 el premio de Gaitero Mayor de España, habiéndolo sido de Asturias en 1956.

Decía que -en ocasiones- los pagos se retrasaban más allá de lo tolerable, como la deuda que tenían con Bernardo Fuentes por un total de 8.405 pts. por horas extraordinarias dedicadas a la construcción de la Plaza cubierta de Abastos, cinco años antes, o las 2.000 pts. que le debían a Alfredo Solares Rodríguez como indemnización -desde hacía ocho años- cuando dejó el local municipal que había alquilado y que había utilizado como herrería, con la finalidad de que ése y otros locales fuesen derribados para ampliar el patio escolar.

-En junio de 1954 Manuel Labra Blanco Poó solicitó abrir un salón o pista de baile en la Vega de los Caseros, tras haber conseguido el correspondiente permiso en el Gobierno Civil.

-A José Somoano Poó se le autorizó a edificar una casa en la carretera de Colunga, la misma que vemos hoy, donde conocimos su sierra de madera con varios trabajadores.

-Los que ya tenemos cierta edad recordamos el incendio que se produjo en el segundo piso del edificio que albergaba la oficina de Telégrafos, en cuyo bajo estaba el Bar Económicos, edificio propiedad de Darío Quesada Arnedo, al que el Ayuntamiento abonó el 50% de los gastos de restauración de la citada oficina. Una fila de personas trasladaba agua en calderos de mano en mano y en cadena desde el río Sella aquella noche, mientras la sirena de la fábrica de Muebles Nachón llamaba a los vecinos y las dos campanas de la iglesia tocaban a rebato.

-En octubre, el Jefe Provincial de Sanidad nombró a Luis Miyares González odontólogo municipal interino, con un haber anual de 6.500 pts.

-Durante el tercer trimestre de 1954 el Ayuntamiento dejó de abonar en las dos farmacias las recetas de la Guardia Civil -por primera vez tras casi dos décadas- y continuó pagando las de la beneficencia pública municipal que precisaban los muchos necesitados del concejo, comenzando a pagar las de los funcionarios municipales.

-El Ayuntamiento colaboraba con el “Día de América en Asturias” con un donativo que remitía a la Corporación del Ayuntamiento de Oviedo, (en el acta figura como “Día de América en Oviedo”).

-José Luis Tejo Suárez -en nombre de los vecinos del Callejón de Titi- solicitó que se instalase alguna luz pública en el mismo por ser un lugar de mucho tránsito y muy oscuro.

Aún José Ramón Blanco insistió después para que colocasen dicha luz.

Así se instaló la misma en el centro del citado callejón.

Los funcionarios de arbitrios eran celosos de su trabajo, como vemos en el siguiente asunto:

El día 3 de noviembre de 1953 el camionero Benigno Ordiales Berdasquera -vecino de Santurce (Vizcaya)- llegó a Arriondas en dirección a Bilbao, con un camión de nueces, exigiéndole los agentes de arbitrios municipales que presentase el documento de tránsito de la mercancía. Como no lo pudo presentar, se le multó con 150 pts.

Casi un año después este camionero presentó un certificado de la alcaldía de Piloña acreditando que había adquirido las nueces en Infiesto, San Román y Valles, de modo que quedaba justificada la procedencia de las nueces.

En buena lógica se le devolvieron los treinta “duros” de la multa abonada.

-En noviembre de 1954 se aprobó construir dos lavaderos públicos en Cofiño y Villar de la Cuesta, cuyo presupuesto conjunto presentado por Armando Palacios sumaba 5.225 pts.

-Muy deficiente era la luz pública en la calle Calvo Sotelo (hoy Constitución o carretera de Colunga), solicitando los vecinos que se colocasen cinco luces más hasta el puente del ferrocarril; así se hizo, costeando los vecinos de la calle el 50%.

-Y mientras se sorteaba la lotería de Navidad de 1954, quedó constancia por escrito de que los veintiocho plátanos de sombra del paseo central de la plaza Venancio Pando habían sido talados para dar paso al nuevo proyecto de urbanización de la misma.

El contratista A. M. interpretó que dichos árboles le pertenecían, pero -finalmente- abonó a las arcas municipales 2.500 pts. por ellos, como se había acordado con él al tratar el asunto de la legítima propiedad de los mismos.

No dejaremos de señalar que -mediante el oficio nº 1.340 del Distrito Forestal- se citó a la alcaldía para que el día 21 de enero de 1955 prestase declaración ante dicha jefatura, al haberse abierto expediente por la tala de los veintiocho plátanos de sombra de la Plaza Municipal sin la previa autorización de dicha Jefatura de Distrito.

-En noviembre de 1954 se aprobó construir dos lavaderos públicos en Cofiño y Villar de la Cuesta, cuyo presupuesto conjunto presentado por Armando Palacios sumaba 5.225 pts.

-Muy deficiente era la luz pública en la calle Calvo Sotelo (hoy Constitución o carretera de Colunga), solicitando los vecinos que se colocasen cinco luces más hasta el puente del ferrocarril; así se hizo, costeando los vecinos de la calle el 50%.

-Y mientras se sorteaba la lotería de Navidad de 1954, quedó constancia por escrito de que los veintiocho plátanos de sombra del paseo central de la plaza Venancio Pando habían sido talados para dar paso al nuevo proyecto de urbanización de la misma.

El contratista A. M. interpretó que dichos árboles le pertenecían, pero -finalmente- abonó a las arcas municipales 2.500 pts. por ellos, como se había acordado con él al tratar el asunto de la legítima propiedad de los mismos.

No dejaremos de señalar que -mediante el oficio nº 1.340 del Distrito Forestal- se citó a la alcaldía para que el día 21 de enero de 1955 prestase declaración ante dicha jefatura, al haberse abierto expediente por la tala de los veintiocho plátanos de sombra de la Plaza Municipal sin la previa autorización de dicha Jefatura de Distrito.