POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
En julio del año pasado lo escribí: “Hace unos días que he estado abajo, en el sur, casi en los límites, desde donde escribo con sonido romántico: “La Venta del Culebrín y Monesterio”. Todo aquí empieza a ser nuevo. Acabo de dejar Sierra Morena y los caminos de la Plata me adentran en otras tierras que aguardan y esperan, sin prisas, pacientes. Comienza Extremadura. Es una ruta muy antigua que une pueblos y gentes, que une lo comercial y lo festivo, que une creencias y convicciones. Es la Vía de la Plata”.
Detalles de la iglesia parroquial de San Pedro Apóstol y rótulo de la calle “Zurbarán”, dedicado el universal pintor extremeño Francisco de Zurbarán, hijo de Luis de Zurbarán e Isabel Márquez, natural de Monesterio.