EL EVENTO COMENZÓ CON UNAS PALABRAS DEL DIRECTOR DE LA ENTIDAD FUNDADA EN 1810 Y PRESIDENTE DE HONOR DE LA R.A.E.C.O., JOAQUÍN CRIADO, QUE RESALTÓ LA FIGURA DE MUÑOZ MACHADO COMO «UNO DE LOS PROHOMBRES DE CÓRDOBA EN DISTINTOS ÁMBITOS DE LA VIDA»
El jurista y escritor Santiago Muñoz Machado fue nombrado ayer académico de honor por parte de la Real Academia de Córdoba. El acto se celebró en el Salón de Columnas del Edificio Pedro López de Alba de la Universidad de Córdoba con la presencia de familiares del personaje distinguido, así como representantes del mundo académico, cultural, político, empresarial y cultural de la provincia, especialmente de su cuna, Pozoblanco.
El evento comenzó con unas palabras del director de la entidad fundada en 1810 y presidente de honor de la R.A.E.C.O., Joaquín Criado, que resaltó la figura de Muñoz Machado como «uno de los prohombres de Córdoba en distintos ámbitos de la vida».
Seguidamente, fue el turno del académico Fernando Cruz-Conde, que aseguró que «cumplimos un deber de justicia» con el nombramiento del también ensayista como académico de honor. «Estamos hablando de un gran maestro del Derecho que siempre se ha sentido muy vinculado a su tierra de origen», subrayó.
Creación de las academias
El discurso del también catedrático de Derecho Administrativo por la Universidad Complutense, que tuvo por título «Palabras de Ley», se centró en la importancia histórica que ha tenido el lenguaje jurídico en el castellano. Al inicio de su intervención, Muñoz Machado hizo un repaso histórico por la creación de las academias de la lengua en Europa como focos del saber y de promoción de la cultura. De este modo, sitúo su origen en las reuniones de eruditos que se celebraban en casas de nobles y personajes adinerados en el siglo XVII en Italia y en Francia.
Tradicionalmente se ha defendido que en el procedimiento de elaboración de este catálogo jugaron un papel fundamental obras clásicas «de notoria calidad» de la Literatura española escritas por grandes maestros, como Cervantes, Quevedo o Góngora. Sin embargo, según defendió el intelectual pozoalbense, recientes estudios ponen de manifiesto la importancia de los textos jurídicos, como ordenanzas, fueros o edictos, como «principal granero de material léxico». De esta manera, se calcula que 48 textos legales forman parte de las fuentes de esa publicación.
Fuente: http://sevilla.abc.es/