SE CREÓ EN MARZO DE 2001, EXPLICA SU DIRECTOR Y CRONISTA OFICIAL DE MEDINA DEL CAMPO, ANTONIO SÁNCHEZ DEL BARRIO
El municipio vallisoletano de Medina del Campo en los siglos XV y XVI estuvo marcado por las ferias de alcance internacional, que se celebraban en la Plaza Mayor y calles aledañas, ya que cada oficio tenía su espacio. Este tipo de actividades comerciales triplicaban la población de la villa entre mayo y octubre y tenían una repercusión fundamental en la economía, la cultura la sociedad y el arte. De hecho, el legado que dejaron fue tan destacado que no podía caer en el olvido, por eso, en marzo de 2001 se creó el Museo de las Ferias, explica su director y cronista oficial de Medina del Campo Antonio Sánchez del Barrio. «Es un espacio único en España porque no existe otro dedicado a este tipo de transacciones comerciales y ferias. Además, las de Medina del Campo eran un referente en el mundo del comercio», detalla.
A lo largo del recorrido se exponen piezas artísticas, históricas y documentales relacionadas con los mercados, entre ellas, ‘La Piedad’, de Juan de Juni, el ‘Retablo Virgen del Pópulo’ o ‘el Tríptico de la Sagrada Familia con Santo Domingo’ y ‘San Francisco’, de Marcellus Coffermans. Todo ello, para narrar la historia de mercaderes y feriantes de todas las procedencias que convirtieron a Medina en un foco de compraventa de productos como lana, textil, obras de arte, libros, santuarios o remesas de papel. El comercio dinerario alcanzó todavía mayor relevancia y elementos como la letra de cambio y otras formas de pago y crédito se convirtieron en los grandes protagonistas de estos encuentros, apunta Sánchez.
La colección permanente se divide en tres bloques. El primero dedicado a las clásicas ferias de mercancías de los siglos XV, XVI y XVII, el segundo a las ferias de pagos y transacciones financieras que «movían el dinero de la Corona de Castilla y marcaban el espacio y el tiempo en el que comercializaba con la Europa del momento, ya que eran el centro de contratación y de pagos», informa el cronista. Esta sección está integrada por libros de cuentas, manuales, 58.000 cartas comerciales, pergaminos y una colección de más de 28.000 letras de cambio exclusivas, además, de utensilios que empleaban en las transacciones.
El último bloque está destinado a Simón Ruiz, comerciante y hombre de negocios vinculado a este municipio vallisoletano. En el Archivo Simón Ruiz, que gestiona la Fundación Museo de las Ferias desde 2001, se encuentran tanto los documentos correspondientes a su casa de comercio como los del hospital general que funda en 1591. Este Archivo está declarado Bien de Interés Cultural y cuenta con un conjunto documental único en el país «tanto por su riqueza como por su contenido».
El Museo recibe una media de 13.000 visitantes al año y cuenta con cien piezas expuestas, aunque en almacenes aglutina más de un millar, y 150 tablas flamencas. Hasta el 13 de septiembre los visitantes también podrán deleitarse con una exposición temporal de fotografía histórica, que muestra la evolución del paisaje urbano de Medina del Campo entre 1970 y 1980. Para el mes de noviembre está prevista otra sobre las marcas comerciales y sellos de los siglos XVI y XVII. Además, en otoño tratarán de recuperar las presentaciones de libros, simposios, conferencias y otras actividades que han tenido que posponerse por la pandemia del coronavirus, entre ellas, las organizadas para la celebración del 20 aniversario de este espacio museístico.
Fuente: https://www.elnortedecastilla.es/ – CLAUDIA CARRASCAL