POR RAFAEL SÁNCHEZ VALERÓN, CRONISTA OFICIAL DE INGENIO (REGIÓN CANARIA)
El Amicus
Mercante de vapor inglés de 7125 toneladas de registro bruto. Construido en 1944 con el nombre de Empire Noble por el gobierno británico durante la Segunda Guerra Mundial. Pertenecía a la naviera “Tempus Shpping Co. Ltd.” de Cardiff.
Carga y destino
Procedente de Australia, vía Cape Town (Sudáfrica), transportaba un cargamento de 8776 toneladas de trigo con destino al continente europeo y Reino Unido, sin hacer escala en el Puerto de la Luz.
Embarrancamiento
El 23 de julio de 1957, navegando en dirección norte por aguas de la costa sur de Gran Canaria, quedó encallado a 100 metros de la orilla en el lugar conocido por El Matorral a muy escasa distancia de Castillo del Romeral (T.M. de san Bartolomé de Tirajana), entre las playas de Arinaga y Maspalomas, sufriendo averías en el pique de proa y doble fondo que quedaron inundados, no afectando las vías de agua a las bodegas, quedando con la proa en dirección a Las Palmas, escorado sobre un banco de arena, sujeto en un ligero bajo con la proa encajonada en el mismo.
Causas
Aunque un fuerte viento castigaba aquellas costas, no había gran oleaje, pudiendo navegar sin dificultad los barquillos de pesca por los alrededores del barco encallado. Se suponía que el varamiento se produjo debido a la fuerte calima que reinaba en un intenso día de calor. Se hablaba también de un despiste provocado por una luz de Aldea Blanca, poblado a unos kilómetros al interior.
Daños
En una revisión posterior en las salas de máquinas, se comprobó que los tanques de combustible habían sufrido una ligera fisura por donde penetraba el agua. El equipo de buzos que participó en las operaciones, en el reconocimiento del fondo del buque, comprobaron que el agua no llegaba hasta las bodegas por tratarse de un barco de doble fondo.
Planes de reflotamiento
A marea vacía se notaba en el barco siniestrado un ligero inclinamiento, lo que ofrecía buenas perspectivas para que una vez aligerado de peso y a marea llena, con un buen tirón de los remolcadores y la ayuda del propio motor, podría ser salvado.
Auxilios
Desde el Amicus se estableció comunicación con la Estación Telegráfica de Las Palmas para que dieran aviso a la casa consignataria Miller y Cía. y los representantes de la Cía. aseguradora Lloyd, que pusieron todo su empeño en el salvamento del buque. Se puso en alerta al remolcador Gran Canaria por si se agotaban todas las posibilidades de ponerlo a flote por sus propios medios en la pleamar de la tarde. Tareas que se llevaron a cabo acudiendo desde el Puerto de la Luz hasta el lugar del siniestro dicho remolcador con dos gabarras a fin de facilitar los trabajos de salvamento. Se temía la posibilidad de que penetrara agua en las bodegas con peligro que el buque pudiera explosionar debido a la fermentación del grano. Ante la imposibilidad de su reflotamiento, al mediodía del día siguiente se hizo a la mar el remolcador Fortunate con dos gabarras y un aljibe para intentar el reflotamiento con la nueva pleamar. A lo que se unió una gabarra arrastrada por el remolcador Cory la noche del 24 de julio. Las gabarras iban cargadas con material para el salvamento del buque siniestrado, además de una grúa y los buzos. Desde los remolcadores adosaron a su costado dos gabarras que descargaron trigo de las bodegas de proa.
Los habitantes de la zona
Para los habitantes de Castillo de Romeral y las escasas familias del Matorral, la presencia del buque sobre aquella playa constituyó un curioso espectáculo desde su encallamiento entre las once y 12 de la noche a pesar de que no hicieron sonar la sirena, ni permitieron que los barquillos de pesca se acercaran a su costado para una posible ayuda. Extrañados por el suceso ya que otros varamientos anteriores se habían producido en las cercanías al norte en la Punta Tenefé.
Incidencias con las gabarras
En la tarde del día 25 de julio cuando era remolcada por el Forrtunate, una de las gabarras con destino al Puerto de la Luz quedó a la deriva al romperse un grillete, sin que los tripulantes del remolcador se percataran de su pérdida con dos personas a bordo, hasta las 24 horas. La gabarra acabó maltrecha en la Playa de Vargas donde fue encontrada por el Fortunate con los dos tripulantes ilesos. Parte del trigo descargado y dañado se vendió en el mercado local. El mismo día la gabarra Blandy XIII que había trasvasado 80 toneladas de trigo fue remolcada por el Cory en dirección al Puerto de la Luz sobre las 13 horas y cuando navegaba a la altura de la Baja de Gando, debido al mal tiempo se inundó por lo que se tuvo que pasar al remolcador a las dos personas que se encontraban en ella, terminándose por hundir en la Playa de la Peña.
Reflotamiento del Amicus
El día 26 de julio, terminados de reparar los daños principales y vías de agua, se descargaron 290 toneladas de grano de las bodegas 1 y 2 del Amicus, terminando por aligerarse para ser reflotado. Aprovechando la pleamar del mediodía, a las 11,45 de la mañana el buque pudo ser desencallado con ayuda de los remolcadores Fortunate y Gran Canaria que tiraron del buque, ayudado también de su máquina, quedando fondeado a unos 500 metros de la playa del Matorral junto a los dos remolcadores que participaron en la maniobra. Con posterioridad, se recuperaron las anclas del Amicus y del remolcador Fortunate.
Traslado al Puerto de la Luz
Remolcado por el Fortunate, junto a una gabarra, sobre las cinco y media de la tarde llegó a Las Palmas, pasando a ocupar atraque al muelle de La Luz para ser sometido a reparaciones. Parte del cargamento de trigo a granel fue descargado en gabarras.
Reparaciones
Una vez en el puerto se procedió a reparar el Amicus provisionalmente a fin de que pudiera reanudar viaje a Inglaterra y entrar en dique seco. Trabajos que se culminaron en veinte días. Una vez reparado partió el 14 de agosto con destino a Falmouth desde la explanada del muelle de la Luz donde se encontraba.
FUENTE;: CRONISTA R.S.V.