LA COLOCACIÓN DE ESTA PLACA FUE PROMOVIDA POR EL CRONISTA OFICIAL DE NOREÑA, MIGUEL ÁNGEL FUENTE, Y POR LA ASOCIACIÓN DE AMIGOS DEL CAMINO DE SANTIAGO DE SIERO, SARIEGO Y NOREÑA

«En el año 1593 D. Gabriel de Lorenzana y Dña. Clara Argüelles firmaron la donación para construir en esta zona un hospital que socorriese a pobres y peregrinos con agua, lumbre, sal y cama. En su recuerdo, la villa de Noreña MMXV». Esta leyenda figura desde ayer en una placa realizada por el escultor Iglesias Luelmo en La Playina de Noreña.

La colocación de esta placa fue promovida por el cronista oficial de Noreña, Miguel Ángel Fuente, y por la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Siero, Sariego y Noreña, con el objeto de acreditar y realzar el paso de la ruta jacobea por la villa y atestiguar que en su día hubo en ella varios edificios destinados a auxiliar a los caminantes.

El acto de descubrimiento de la placa, presidido por el alcalde en funciones, César Movilla, contó con la presencia de su autor, así como la de varios representantes de la asociación y la del propio cronista oficial, quien justificó su propuesta de colocación de la placa como «recuerdo de una zona donde estaba ubicado el hospital, para conocimiento de caminantes y peregrinos, así como para los incrédulos que tanto azotan nuestro derecho a ser merecedores de pertenecer al recorrido histórico por donde los estudiosos y personas notables al respecto situaban nuestro tramo en el recorrido del camino hacia Compostela».

Por su parte, el presidente de la Asociación de Amigos del Camino. Manuel Jesús Samartino, celebró que se haya dejado constancia del paso del camino por Noreña, e invitó a los noreñenses a que traten muy bien al peregrino que pase por la localidad. «Quien va a decir que pasa el camino por aquí no son los papeles oficiales, sino los peregrinos», aseguró.

Asistieron también al acto los directores de Caja Rural de Noreña y Pola de Siero, Roberto del Sol y Nicolás González, respectivamente. La entidad financiera fue la patrocinadora de la placa.

El autor de la obra habló del «privilegio» que ha supuesto para él realizar la placa de bronce sobre la ruta jacobea. Sobre ella dijo que está seguro de que «su reflejo con la luz de las estrellas guiará a los caminantes por este noble pueblo de Noreña». Finalmente, Movilla se mostró muy satisfecho con este elemento que ayudará a que los caminantes reconozcan el paso de la ruta por Noreña y propuso dibujar en el suelo las huellas de los edificios que ocuparon lo que hoy es La Playina para dejar constancia ante los visitantes de ese pasado vinculado al camino a Santiago.

Fuente: http://www.lne.es/ – Manuel Noval Moro