POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
Comenzamos el día de hoy con una fotografía realizada por Diego de Angulo en torno a 1914 donde podemos ver la fachada del Ayuntamiento de Montoro. Esta imagen se conserva en la Universidad de Sevilla, y aunque pude que existan muchas más del término, no se llegaron a terminar de clasificar por quedarse sin fondos en 2006.
Retomamos los apuntes ya dados con anterioridad sobre las Casas del Ayuntamiento de Montoro. En esta ocasión trataremos como en 1701 la Casa de Todos fue remodelada por el hundimiento que sucedió, en 1698, de gran parte del edificio consistente en sólo un piso.
Debido a este problema, los montoreños decidieron costear a sus expensas el monumento actual, sacando los fondos de sus bienes.
Es IMPORTANTE conocer que dicho edificio NUNCA perteneció a la Casa de Alba, pues fue realizado, mantenido, ampliado y rehecho con el dinero del pueblo, sin que el mismo halla albergado nunca al Duque de Alba. De hecho en el Archivo Municipal quedan todas las cuentas que se tomaron para la realización del mismo.
En la fotografía vemos el Ayuntamiento totalmente encalado, cuya causa directa fue la continua y repetitiva epidemia del Cólera Morbo que asolaba la población cada vez que despuntaba un caso. Hemos de decir que la cal es un agente antibacteriológico que destruye cualquier atisbo de bacteria que hubiese en la superficie.
Del mismo modo y como anécdota diremos que las columnas del Ayuntamiento fueron realizadas en la localidad por sus picapedreros, y que existieron problemas a la hora de colocarlas, pues una de ellas se desprendió nada más que con ubicarla en su lugar estando un operario cerca del hecho en cuestión, salvándose de ser aplastado por los reflejos propios de la juventud.
Existen miles de historias más sobre este lugar, pero comenzaremos por esta historia por ejemplo.