POR MANUEL LÓPEZ FERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DEL ARZOBISPO (JAÉN)

Dentro de los actos programados en el año de la misión, la comunidad parroquial de san Andrés, en la tarde noche de ayer se procedió a bendecir la nueva custodia de asiento obra del taller de orfebrería Orovio de la Torre de Torralba de Calatravas de Ciudad Real.

Con un templo lleno de numerosos fieles interesados en ver de cerca la obra de arte de la nueva custodia, ver la exposición que se ofrecía y escuchar de sus diseñadores y autores el proceso de elaboración y los detalles de la misma.

El párroco Bartolomé López y el sacerdote Hildebrando Escobar han celebrado el rito de bendición la nueva custodia. Intervino el Coro Parroquial de la Iglesia de la Asunción de Iznatoraf, dirigido por Salvador Martínez.

El párroco ha explicado el proceso que ha llevado cinco años, desde que le llegó la donación para este fin. Ha recordado emocionado al trinitario padre Sátur, con quien compartió los primeros momentos de las gestiones de este proyecto. Ha realizado una catequesis del significado de cada uno de los niveles de la custodia, y ha agradecido a Felipe Herreros su entrega y dedicación a este proyecto, así como a los colaboradores de la exposición temporal comisariada por José Martínez Romero, y con la ayuda de Sevi, Juan Carlos, Esteban López y Rafi Romero que ha realizado en un mínimo tiempo la faldilla que llevará el trono, así como otra serie de personas colaboradoras indispensables. Agradeció la donación del trono por la Cofradía del Resucitado, cuyo origen es de la cofradía de la Sangre de Cristo de Baeza, uno de los más antiguos de la provincia, resaltando la labor de Agustín para acondicionarlo para el Corpus.

A continuación Felipe Herreros, que ha diseñado esta custodia, llamada de asiento, y de la imagen de la Virgen de la Fuensanta que va en el primer nivel, explicó a todos los fieles los detalles importantes y su representación.

La nueva custodia es de corte clásico, a modo de torre eucaristía. En el primer nivel está el milagro de la Virgen de la Fuensanta, que realizó en barro Felipe Herreros y que ha pasado a metal es la primera representación tridimensional del milagro de la Virgen; este primer nivel simboliza el bautismo; en el segundo y central nivel de la custodia estará el manifestador eucarístico, simbolizando a la eucaristía como el centro de la vi, da cristiana; el último nivel lo ocupa un conjunto de campanas, tantas como tiene la localidad, representando la confirmación, el sacramento que alcanza la madurez cristiana y nos invita a anunciar la fe. Por último, la torre eucarística esta coronada por la figura de la fe; virtud que se siembra en el bautismo, se alimenta en la eucaristía y se consagra en la confirmación. El conjunto mide un total de 275 cm de alto y una base de 1 metro cuadrado, con un peso de 150 kilos. Se debe resaltar que contiene veinticuatro columnas, explicando su significado, adornos de espiga y uvas, azucenas y una reliquia del Beato Francisco López.. Puede ser un homenaje a las custodias de Baeza y Jaén.

Después se pasó a visitar la exposición efímera de custodias, Custodi Vitas Nostras en donde se han reunido las custodias de todos los templos o capillas de la localidad, ocupando un lugar de privilegio, las que representaban a las Cuatro Villas, Iznatoraf, Sorihuela, Villacarrillo y Villanueva. Una recreación de las casullas y ropa litúrgica para estas ocasiones. Un gran acierto el reunir custodias de varios siglos y localidades, con una excelente ambientación.