POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Con frecuencia nos vemos en la necesidad de llamar por teléfono a los suministradores de luz, gas, banda ancha, cuenta corriente, agua corriente… para cambiar la domiciliación de un recibo, la dirección del suministro, dejar la empresa, cancelar un compromiso…, y con más frecuencia nos encontramos con una operadora (operadores hay menos) que nos lo pone difícil, exige alguna declaración ante notario, una carta del tribunal de La Haya, nuestra presencia en carne viva en la sede social, sito en la Cochinchina, al sur de Camboya… ¿Qué hacer entonces? Yo cuelgo el teléfono y marco otra vez el mismo número, siempre atiende una operadora distinta que pone condiciones diferentes, y cuelgo y vuelvo a marcar hasta que doy con la más tolerante, menos conocedora o menos celosa de su trabajo, que admite mi trámite en las condiciones más ventajosas. ¡Qué placer aprovecharse de las multinacionales!
Fuente: https://www.lne.es/