EL CRONISTA OFICIAL DE OSCOS Y PRINCIPAL IMPULSOR DE LA CANDIDATURA DE ESTA COMARCA PARA EL PREMIO PUEBLO EJEMPLAR DE ASTURIAS 2016, JOSÉ ANTONIO ÁLVAREZ CASTRILLÓN, CREE QUE ESTE TIPO DE PERSONALIDAD DE SUS HABITANTES ES COMÚN A TODO EL ÁREA MONTAÑOSA QUE OCUPA EL ORIENTE LUCENSE Y EL OCCIDENTE ASTURIANO
Los reyes de España realizan este sábado una visita histórica a la vecina comarca asturiana de Oscos para entregar a los vecinos de los tres ayuntamientos que la conforman –Santa Eulalia, Villanueva y San Martín– el galardón de Pueblo Ejemplar de Asturias 2016, que les ha sido concedido por la Fundación Princesa de Asturias.
Pero este reconocimiento va mucho más allá de la simple promoción de los atractivos paisajísticos, patrimoniales o etnográficos que ofrece esta comarca, sino que se trata de un premio a la labor de todos los vecinos que, además de haber sabido proteger y conservar el legado de sus antepasados –muchos de ellos emigrantes–, constituyen un ejemplo a destacar en valores como el colaboracionismo o la ayuda mutua, lo que ha acabado por imponer un sistema de gestión del rural muy distinto al que se estila en los fronterizos municipios lucenses.
Esa forma de ser del paisanaje ha permitido a la comarca romper con el secular aislamiento al que la había castigado su difícil orografía para acabar transformando ese mismo paisaje en su mejor potencial de futuro.
Entre los 471 vecinos de Santa Eulalia, los 422 de San Martín y los 310 de Villanueva, la comarca de Oscos apenas suma 1.200 habitantes y aun así, es capaz de que cada uno de estos municipios siga manteniendo activos sus centros de salud, las aulas de su colegio o la atención a sus ancianos.
COLABORACIÓN
«A colaboración estreita entre os gobernos municipais faise absolutamente necesaria para poder manter servizos», afirma el alcalde de Santa Eulalia de Oscos, Marcos Niño, quien se muestra convencido de que esta fórmula de colaboración institucional es la única válida para aprovechar sinergias y que los vecinos no pierdan derechos.
En esta línea se expresa también el alcalde de San Martín de Oscos, Javier Martínez, que cree que el premio concedido a la comarca por la Fundación Princesa de Asturias es un reconocimiento a esas «iniciativas vecinales compartidas».
Precisamente, esa especial personalidad de la vecindad de Oscos y su carácter colaborativo se ha puesto aún más de relieve estos días, en los que todos los vecinos participan en engalanar sus pueblos de cara a la visita de este sábado.
Marcos Niño destaca que ayuntamientos tan pequeños solo pueden disponer de un empleado municipal y ante esta situación «son os propios veciños os que traballan no arreglo dos parques, dos xardíns, na limpeza das rúas…», pero aclara que este hecho no es puntual, «senón que se produce ao longo de todo o ano, sempre que é necesario».
El cronista oficial de Oscos y principal impulsor de la candidatura de esta comarca para el premio Pueblo Ejemplar de Asturias 2016, José Antonio Álvarez Castrillón, cree que este tipo de personalidad de los habitantes de Oscos es común a todo el área montañosa que ocupa el oriente lucense y el occidente asturiano, «el asociacionismo en Oscos no es nuevo ni diferente al de los municipios lucenses con la que es limítrofe, sino que es algo inherente al rural, sobre todo, en un territorio en el que el aislamiento y la falta de recursos impulsó una personalidad solidaria, que se reflejaba en manifestaciones en las que el trabajo en común se hacía necesario, como eran las matanzas, las mallas o las rapas, entre otras, y que acaban en auténticas fiestas vecinales».
Estas iniciativas, que en su mayor parte nacen de forma espontánea entre la vecindad, han tenido en Oscos una particular continuidad, que ha facilitado el asentamiento de iniciativas que se revelan como excelente fórmula para luchar contra la crisis del rural.
COLEGIO AGRUPADO
Entre ellas destaca el Colegio Rural Agrupado (CRA) Oscos, con aulas abiertas en los tres municipios, pero con una dirección, un profesorado e, incluso, una asociación de padres en común. Los tres ayuntamientos también comparten una trabajadora social y una animadora sociocultural, lo que permite reducir costes sin renunciar a estos servicios.
Las guardias médicas compartidas son otro de los servicios que se rotan entre los tres ayuntamientos que conforman la comarca de Oscos, lo que permite que todos ellos sigan manteniendo abiertos sus centros de salud, al contrario de lo que sucede en poblaciones lucenses como Negueira de Muñiz (214 habitantes) o Ribeira de Piquín (580), en la que los recortes en este área obligan a que si un vecino de estos municipios necesita una atención de urgencia deba acudir, invariablemente, a los PAC de A Fonsagrada o Meira, respectivamente.
Continuar avanzando en esta línea de colaboración «estreita» es el objetivo común que se marcan los tres alcaldes de la comarca de Oscos. «La fusión de ayuntamientos significaría perder ayudas y caminar hacia la desaparición, por lo que es necesario continuar avanzando en la idea de los servicios compartidos para poder reducir costes y hacerlos sostenibles», señala el alcalde de Villanueva de Oscos, José Antonio González.
Los tres gobiernos locales esperan continuar avanzando en este terreno y proyectan, entre otras iniciativas, un parque de maquinaria municipal compartida o incluso el lanzamiento de un sello de calidad propio que sirva para promocionar los productos –miel, setas, castañas y carne de porcino y, sobre todo, vacuno– que se producen en la zona.
Buscar alternativas económicas que hagan viable la fijación de población en una zona tan castigada por la crisis demográfica como es el occidente asturiano, es la finalidad con la que trabaja la asociación de turismo, también compartida por los tres municipios de Oscos, y que preside Francisco López Enríquez.
El presidente del colectivo, que próximamente pretende iniciar una campaña para que se puedan integrar en el mismo otros sectores empresariales, defiende que, «aínda que quizás sexamos uns insconscientes», si decidieron quedarse en la zona es «porque vemos que hai posibilidades».
Con un total de 430 plazas hoteleras disponibles en la comarca, el turismo rural se ha convertido en uno de los principales motores económicos de la zona. «Segue sendo unha actividade complementaria», reconoce Francisco López, «pero é un potencial que temos gracias a esas persoas que fai case 30 anos arriscaron en aproveitar as axudas europeas para invertir na rehabilitación das casas e no coidado do territorio».
Este número de plazas hoteleras sorprende con relación al que ofrecen otros municipios lucenses cercanos, como A Fonsagrada, que a pesar de tener una población netamente superior, 3.838 habitantes, el número de plazas hoteleras ni se aproxima y eso, a pesar, de ser una de las etapas del cada vez más transitado Camino Primitivo.
Para Jorge Rico, propietario de O Ventorrillo en A Fonsagrada, el turismo rural en Galicia tarda en arrancar «pola pouca coordinación existente entre as diferentes administracións», lo que según él hace que el empresario tenga que caminar prácticamente solo. «Hai problemas para sinalizar os establecementos e as propias rutas. Nos municipios asturianos veciños isto non é así e o turismo coidase máis».
Este empresario fonsagradino reconoce, no en vano, que el premio que recibe Oscos, «tamén nos beneficia a nós, porque estamos cerca e o turista que para aquí non ten problema en desprazarse, incluso, ata As Catedrais ou Ribadeo».
El presidente de la asociación de turismo de Oscos reconoce el buen trabajo realizado en el Principado en materia de mantenimiento de territorio y el respaldo que, sobre todo desde los ayuntamientos de la comarca, se ha dado siempre a las diferentes iniciativas privadas, aunque a nivel autonómico echa de menos «unha maior promoción da comarca fóra das nosas fronteiras».
Fuente: http://elprogreso.galiciae.com/