POR FRANCISCO JOSÉ ROZADA MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE PARRES-ARRIONDAS (ASTURIAS).
Ya en el año 1673 se lee en los conservados “padrones de distinción” del concejo de Parres, donde se anota quienes eran hijosdalgo (la mayoría) o pecheros: “Toribio de Noriega hijodalgo principal, de casa y solar conocido” quien se casó con Ana González de Teleña, ambos fueron los bisabuelos paternos de Julián Antonio Noriega de Bada.
En el año 1787 en el censo del conde de Floridablanca se contabilizan en Asturias un 70% de hidalgos, de un total de 345.833 habitantes.
De modo que casi tres de cada cuatro hidalgos residían en Asturias, Vizcaya, Guipúzcoa, Álava y Burgos, mientras el cuarto solo suponía el 10% de la población total del país.
No fueron pocos los litigios que se entablaron para demostrar las pruebas de nobleza de algunas familias cuando -a lo largo de los siglos- se las solicitaban instancias como el ejército, la iglesia o la administración.
Los pecheros -obligados a pagar impuestos, frente a los hidalgos y al clero que no tenían ese deber- no tenían necesariamente que ser pobres, podían tener más o menos riquezas propias, pero sí debían pagar impuestos.
No eran pocos los que presumían de hidalguía, pero eran absolutamente pobres.
Nota:
Aunque en el lomo del primer tomo aparezca el año 1656, realmente se inicia con el año 1653, como demuestro en la fotografía siguiente
FUENTE: https://www.facebook.com/franciscojose.rozadamartinez