POR MARI CARMEN RICO NAVARRO, CRONISTA OFICIAL DE PETRER (ALICANTE)
Continuamos caminando por esta vía urbana en dirección al carrer Nou. Nos queda para finalizar esta aventura recorrer el último tramo de esta calle y, en el n.º 23, encontramos la vivienda que fue también propiedad de la familia Castelló y en ella vivieron Milio Castalla y Safanoria que vendían carbón y leña. Cuando los socialistas fundaron su cooperativa de consumo al final de esta calle, en el tramo que nos ocupa, algunos vecinos decidieron crear otra sin connotaciones políticas y le llamaron la Cooperativa de Dalt. Antes de finalizar la guerra, ante la escasez de artículos, se disolvió y terminada la contienda fue expropiada y se cedió la tienda a Matilde Poveda Alcaraz, luego la traspasó a su hermana Dolores y a la hija de ésta, Julia Tortosa Poveda. Todas las hermanas: Carmen, Dolores, Matilde y Julia eran conocidas como las Mancas ya que este era el apodo de su padre José María Poveda el Manco que fue secretario del ayuntamiento durante 41 años. El hijo de José María y Dolores sin embargo fue conocido como José María el Sacristà.
Ojalá hayamos conseguido traer al recuerdo y reproducir el bullicio de esta angosta callejuela con la intensidad de la vida política y sindical, la algarabía de los colmados, del horno, de las barbe-rías y de los cafés, pero sobre todo ojalá hayamos podido rememorar el latir de cada una de las personas y las familias que, con su día a día, con su trabajo y en definitiva con sus vivencias con-formaron la historia de esta calle y de su propia vida.