POR FULGENCIO SAURA MIRA, CRONISTA OFICIAL DE ALCANTARILLA Y FORTUNA (MURCIA).

Los hubo a lo largo de su historia desde el inicio de ser considerada villa en el siglo XVII al momento actual, que tales personas ilustres  permanecen inéditas y bueno sería para su reconocimiento  traer algunas a colación. A veces nos interesan unos personajes que pertenecen a la nobleza, personas influyentes en los siglos XV y XVI que intervienen en la configuración de la villa, como serían los vecinos que en 1631 acordaron en Concejo Abierto aprobar la Carta  de Población, sin duda los de mejor enjundia.

Pero hay que prestar atención a otros personajes acaso más desconocidos, de la vida cotidiana que sin embargo dejaron huella por su intervención en algunos acontecimientos bélicos o defendiendo los intereses del concejo en  momentos de depresión económica, que hay personajes ilustres de la política española del XIX que acuden a la villa para gozar de sus célebres Baños termales que daría lugar a una lista larga y que hemos tratado en otro lugar. Se trata de personas que hay que destacar someramente y con más hondura en otros trabajos. De momento nos interesan unas figuras que creemos son tan interesantes como olvidadas pero que habría que resaltar como el poeta Vicente Palazón que a mediados del siglo XIX dejó una visión poética de la villa a través de su recuerdo en otras tierras y donde el paisaje de montaña, la Cueva Negra, sus afectos a sus festejos en honor de San Roque queda manifiesto en sus estrofas, lo que corrobora su esposa Josefa Palazón Sánchez, muy querida en el pueblo por sus obras de caridad. Pensamos en otro personaje que diera gloria a la patria por su intervención en la guerra de Filipinas, el militar don  Nicolás Soro Lifante que fuera Teniente Coronel, nacido  en la villa, que tuvo un heroico comportamiento  en la batalla de la Cala de Cabasarán, donde  con un  puñado de hombres consigue una victoria que tuvo resonancia en la nación, lo que se refleja en el periódico Eco de  Fortunas  de 1894 al referirse  a la “Recompensa de Mindanao.

Se constatando que” Con verdadero placer, transmitimos a nuestros lectores la grata nueva que publica la Gaceta, de haber sido ascendido al empleo de Teniente Coronel nuestro muy querido paisano D. Nicolas Soro Lifante..” Se habla del bravo militar, que nacido el 25 de septiembre de 1858 ha merecido el empleo por  inmediato por su  heroico comportamiento en la arriesgada toma de la Costa de Cabasarán al mando de un puñado de valientes peleando brazo a brazo, consiguiendo tan señalada victoria y un lauro más para la patria”.. En ese momento de satisfacción se promete por el periódico una biografía del militar que, al parecer no se hizo.

 Solamente referir otros personajes inéditos  que serán objeto de un estudio amplio y que abrieron camino para lograr en el municipio, cotas importan te de servicios públicos. Nos referimos al  Secretario del Ayuntamiento  D. Alfredo Meca que en los años veinte del nuevo siglo  ejerce como tal en el concejo, gaditano de origen con una soflama capaz de dar constancia de un carácter afable, nunca entumecido por su función  como legalista y asesor, que los hubo de diverso tono.

Las actas municipales del momento nos dicen de un buen hombre pendiente de trabajar en pro de la Villa incluso dejando parte de su patrimonio para reparar las arcas locales, en periodos vidriosos. Los vecinos tomaban parte en sus actuaciones facilitándole su actividad y donde los más pobres eran atendidos convenientemente. Se servía el funcionario de otra figura que merece recordarse  como la de  Don José Miguel Mitges, Oficial Mayor, al que los vecinos llamaban  “ El andaluz”, tal era su carácter, muy interesado en  la creación de una Inclusa en la villa, dado el problema que existía  en general en España sobre tan dramática situación en que se encontraban los niños abandonados. Un tema que retomaremos en el siguiente trabajo.

FUENTE: FSM