POR MARI CARMEN RICO NAVARRO, CRONISTA OFICIAL DE PETRER (ALICANTE)

Transcurría el segundo año de la guerra. El territorio republicano había quedado partido en dos tras la ofensiva franquista en el frente de Aragón que había llevado a las tropas del general Alonso Vega al Mediterráneo por Vinaroz (Castellón), Petrer era un pueblo de la retaguardia. Por orden gubernamental y el mismo día en todos los pueblos del territorio español bajo gobierno de la República, el domingo 22 de mayo se procedió a dar a conocer a todos los vecinos esta propuesta del gobierno y para darlos a conocer se convocó a todo el pueblo en la plaza de la República en una sesión pública en la que se leyó la declaración de principios del gobierno.

Los Trece puntos de Negrín son el primer acto político del gobierno socialista del doctor grancanario Juan Negrín durante la Guerra Civil Española. Fueron publicados el 30 de abril de 1938, y eran una exposición de su programa político. En ellos se establecían y concretaban los objetivos por los cuales se continuaba la lucha y sobre los cuales podía establecerse un principio de acuerdo con aquellos que luchaban contra la República y acabar con la guerra.

Se proponía: 1.- La independencia de España, 2.- La evacuación de las tropas extranjeras, 3.- República popular y democrática con un gobierno de plena autoridad, 4.- Plebiscito para determinar la estructura jurídica y social de la República Española, 5.- Libertades regionales sin menoscabo de la unidad española, 6.- Conciencia ciudadana garantizada por el estado, 7.- Garantía de la propiedad legítima y protección al elemento productor, 8.- Democracia campesina y liquidación de la propiedad semifeudal, 9.- Legislación social que garantice los derechos de los trabajadores, 10.- El desarrollo físico, cultural y moral de la población, 11.- La prohibición para el ejército de intervenir en política 12.- Renuncia a la guerra como instrumento de política nacional y 13.- Amnistía para los españoles que quieran reconstruir y agrandar España.

El doctor Juan Negrín sustituyó en 1937 a Largo Caballero como presidente del gobierno, cargo en el que permaneció hasta el fin de la guerra. Empujado por la necesidad de la ayuda soviética, se apoyó en los comunistas del PCE, con los que coincidía en su línea de dar prioridad a la disciplina y la organización para ganar la guerra, postergando las veleidades de revolución social (en contra de las pretensiones de los anarquistas de la CNT y de otros grupos políticos, como el POUM). En 1938, ante el curso desfavorable de la contienda para las armas republicanas, ofreció a los rebeldes entablar una negociación sobre la base de trece puntos que llevaran a una salida democrática del conflicto; pero la oferta fue rechazada por Franco, que exigió hasta el final una rendición sin condiciones.

En Petrer tenemos la suerte de contar con una foto histórica que nos habla de un momento muy importante dentro del contexto de la Guerra Civil y a la vez nos permite conocer y recordar un edificio singular como era el ayuntamiento hoy por desgracia desaparecido. Es importante resaltar que, según el acta municipal, la mitad del pueblo acudió a la llamada plaza de la República a escuchar la lectura de los Trece puntos. Petrer, tres años antes, en 1935, contaba con 6.319 habitantes. En la foto, casi con toda seguridad están el secretario del consejo municipal que leyó la proclama, el alcalde Rosendo García Montesinos y el resto de concejales: Bonifacio Montesinos, Manuel Pérez Cabedo, Francisco Amorós Pérez, Vicente Navarro Tortosa, Antonio Jiménez Navarro, Pascual Montesinos, Antonio Amat Poveda, José Chico Herrero y María Soriano Beltrán. Como podemos ver hay una mujer concejala, María (Yecla, 1917 – Villena, 2005) que fue la primera mujer que ocupó un cargo político en el Ayuntamiento de Petrer y fue precisamente en 1938.

Desconocemos si la iniciativa de dar a conocer los famosos Trece puntos partió del propio Ayuntamiento o por el contrario fue propiciada desde el propio Gobierno de Negrín a todos los municipios para dar a conocer su programa de gobierno.

Esta exposición programática del gobierno del socialista Juan Negrín pretendió buscar apoyos internacionales para finalizar la Guerra Civil mediante una paz negociada. Programa conciliador rechazado de plano por el general Franco que, tras el éxito militar de la ofensiva de Aragón, se supo próximo a ganar la guerra e imponer sus condiciones. Escasos once meses quedaban para el final de la contienda. De mayo del 38 a abril del 39, los acontecimientos se precipitaron; el agotamiento, cansancio y desánimo militar era patente; las disensiones internas hicieron mella en la cohesión republicana y la República Española fue abandonada a su suerte por las potencias occidentales. Tras la caída de Cataluña en manos franquistas, la suerte estuvo echada para la República.