LA «GUÍA TOTAL, TURÍSTICA Y MONUMENTAL DE OVIEDO» RECORRE LA CAPITAL, A LA QUE LA CRONISTA OFICIAL CARMEN RUIZ-TILVE CALIFICA DE «INAGOTABLE», CON HUMOR, RIGOR Y ORDEN

El Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA se llenó ayer de esencia ovetense y literalmente fue abarrotado por el público que asistió a la presentación de la «Guía total, turística y monumental de Oviedo», escrita por el escritor, montañero y librero Alberto Polledo, colaborador habitual de LA NUEVA ESPAÑA, y Manuel Gutiérrez Claverol, doctor en Geología y miembro del RIDEA.

Los dos, amigos desde la infancia, recorren en el libro la capital asturiana plasmando en el papel seis itinerarios «para disfrutar de una ciudad de cuento» tal como reza el subtítulo de la obra editada por Nobel. Carmen Ruiz-Tilve, cronista oficial de Oviedo, dejó claro que Oviedo es «inagotable», aunque Polledo y Claverol hayan hecho el encomiable esfuerzo de atrapar a la vieja Vetusta en más de 170 páginas plagadas de fotos indicaciones, referencias históricas y toda clase de detalles, como el poner los nombres antiguos y populares de calles y plazas actuales.

El periodista Juan de Lillo destaca en el prólogo que «los autores ofrecen un buen guión de la ciudad con agilidad, buena mano, sobrados conocimientos y mucho amor, hilo conductor de su trabajo». Y ese amor que sienten por la ciudad que les vio nacer quedó de manifiesto ayer en las intervenciones. Alberto Polledo aprovechó incluso para reivindicar una calle dedicada a Juan de Lillo «creo que es la persona perfecta para llevar el nombre de una calle de la ciudad, ahora que parece que ese tema está de moda», señaló, en referencia a la polémica causada por el cambio de nombres de calles aprobado por el Ayuntamiento. El concejal de Cultura, Roberto Sánchez Ramos, sentado en primera fila, escuchaba con atención, igual que el resto del publicó que lleno el Club para escuchar por ejemplo que «para una persona enamorada de su ciudad es un excelso privilegio escribir y publicar una guía dedicada a ella, más si cuentas con la colaboración de un ilustre ovetense que tanto sabe de piedras, como Manuel Gutiérrez Claverol «, como dijo Polledo.

El geólogo, que ejerció 46 años la docencia en la Universidad de Oviedo, condujo una proyección comentada de los seis itinerarios que propone la guía: de la Escandalera a la Plaza de Alfonso II; de la Escandalera al Fontán; desde la plaza de la Constitución al Paraguas; de La Losa al Palacio de Congresos y de la Escandalera a la Vega, para culminar con un completo paseo por el Prerrománico de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Gutiérrez Claverol, que conoce hasta las marcas que los balazos de las guerras fueron dejando en palacios y edificios históricos, destacó que Oviedo sea recomendada por una web turística, como una de las cien ciudades europeas que hay que visitar. Alberto Polledo realizó en su intervención un paseo novelado a través de personajes enraizados en el alma de la ciudad, como el Tigre Juan que Pérez de Ayala situó en El Fontán; la Ana Ozores de Clarín, que paseaba mientras Fermín de Pas la oteaba desde la torre de la Catedral o los protagonistas de «Nosotros los Rivero», de Dolores Medio, que hoy habría cumplido años. Hace diez, en 1996, Antonio Masip, entre el público, fue a visitarla para felicitarla y ya la encontró muerta. Los autores pidieron un aplauso para él. El público respondió con ovación.

Fuente: http://www.lne.es/ – M. J. I.