POR MANUEL LÓPEZ FERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DEL ARZOBISPO (JAÉN)
El vestíbulo del Teatro Cine Regio, perfectamente ambientado con ropas y carteles de carnaval, se llenó de público para escuchar el pregón.
A Pepe Jiménez le correspondió el honor de pregonar el Carnaval 2020 de Villanueva del Arzobispo. La localidad tuvo la suerte de recibir, los recuerdos de un orfebre lleno de palabras de oro, de trabajo, alegría de recuerdos infantiles y juveniles, y especialmente un pregón para la esperanza.
Pepe, vestido de pirata, sueño de la infancia, pero que en su navío cruzó mares de pasión, de bonanza y de tormentas.
Evocación de sus primeros disfraces en Córdoba, la influencia del “Cobos” en las letrillas y música en su juventud; posteriormente con piratas gaditanos.
El periodo en el que la tormenta estalló a unos metros de su velero, fuertes olas se acercaban para cobrarse su presa. En una lucha titánica, remando, acompañado de Olga, hasta el máximo esfuerzo, en unas oscuras noches de tinieblas y relámpagos. Hasta que al amanecer de uno de estos días, se aleja la tormenta de la enfermedad y recupera la vida y las ganas inmensa de vivirla.
Evocó el tiempo de cuaresma que sigue al carnaval; capataz de uno de los tronos. Arrimó el hombro hasta que la sangre brotaba, encontrando la ayuda y entusiasmo en el grupo de costaleros. Una gran luz para todas las cofradías en una época de oro de la Semana Santa de la localidad.
Nuevos proyectos siguen ocupando su vida. Agradeció a todos los que. le embarcaron en esta gran aventura de pirata. Largos y calurosos aplausos recibió Pepe Jiménez, que supo trasmitir la alegría y el dolor, y que llegó a los asistentes, a los que recomendó vivir con fe todos los momentos y con “Humor y Amor” este periodo de carnaval.
Uno de los responsables directos de esta aventura, Diego Jiménez, en primera línea de la batalla, escribió:
“Creo que pocas veces en la vida pasan cosas tan bonitas e inesperadas como ese pregón de carnaval de una tarde de Febrero en el Hall del Regio y que nunca olvidaremos los allí presentes, la vida, esta vida digital y rápida aún guarda momentos tremendamente humanos que jamás podrán ser «digitalizados» y que se deben vivir en el instante preciso, es así, en un instante como un aventurero capitán pirata cordobés enamoró a todo un pueblo y mostró su amor por esta Villa herida y necesitada de «Humor y Amor» desde Córdoba a Villanueva, sin apenas nada y con la pasión de la vida, de un niño que vivió el carnaval de barrios pobres en una ciudad cuna de culturas ancestrales y donde por encima de todo estaba la ilusión, ilusión intacta que Pepe se trajo a Villanueva del Arzobispo, Ilusión de trabajo, de amor eterno, de paso cofrade, de manos de artesano, de difíciles momentos, de ahora la vida y ahora la muerte…. quien te iba a decir a ti capitán que aquel veinteañero enamorado iba a ser ahora un Villanovense de adopción y que somos nosotros los enamorados de tu pasión por la vida, porque solo tenemos eso, -la vida- y no hay más y la capacidad para volver de entre la niebla y regalar la palabra con el corazón en la mano”.
Por su parte Juan Antonio Martínez, carnavalero donde los haya, perteneciente al Grupo “El Brujo”, nos explicó el significado de este cartel.
“En la parte inferior se hace un guiño a la base del carnaval cantado con la instrumentación de sus coplas: el pito de madera, la guitarra, el bombo y la caja. Se hace un guiño a la Asociación “El Brujo” con el sombrero de su logotipo.
En el centro del cartel se representa el carnaval en la calle y se hace referencia a uno de los edificios más representativos, el antiguo Casino. En la parte superior están representadas dos máscaras que dan el toque de color al cartel. Hemos querido incorporar el logo del I Centenario de Villanueva como ciudad”.
Juan Antonio que vive de manera intensa la fiesta de carnaval desde hace largos años, recibió los aplausos y reconocimiento a su entrega y saber trasmitir el sentido de Carnaval.